Los síntomas suelen confundirse con las de algún cuadro respiratorio. El medicamento errado podría generar serias complicaciones en la salud del paciente.
Agosto, tiempo de alergias: piden evitar la automedicación principalmente en los niños Agosto, tiempo de alergias: piden evitar la automedicación principalmente en los niños
Los días de intenso frío parecen alejarse de Santiago y las temperaturas elevadas comienzan a cobrar protagonismo. El viento, sobre todo, parece haber llegado para instalarse en agosto, como suele ser una tradición.
Esta situación genera la aparición de nuevas afecciones en la salud de niños y grandes, debido a los bruscos cambios de temperaturas, sumado a que tanto niños como adultos están en permanente cambio de vestimenta, lo que produce modificaciones en la temperatura corporal, que resultan engañosas para el organismo.
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Las alergias empiezan a aparecer y es motivo de un incremento de consultas médicas en estos días.
Con síntomas similares a las gripes y resfríos, la gente suele confundir el diagnóstico, por lo que se considera fundamental la visita el médico antes de automedicarse.
En diálogo con EL LIBERAL, el Dr. Ángel Muratore, médico pediatra, docente de la Facultad de Ciencias Médicas de la Universidad Nacional de Santiago del Estero, se refirió a estas enfermedades y llamó la atención, principalmente a los padres, para que se mantengan atentos a los síntomas.
"La temporada de alergias que se avecina, suele ser complicada para los pacientes, sobre todo para aquellos que tienen algún cuadro de base o están en las edades extremas de la vida.
La piel (dermatitis, urticarias) y las vías respiratorias (rinitis alérgicas, asma, síndromes bronquiales instructivos) suelen ser los órganos de choque de los procesos alérgicos. Nuestros ojos, por efecto de la tierra, el viento y los brotes, también se ven afectados con episodios de conjuntivitis alérgica", advirtió el profesional sobre las patologías que, si no aparecieron, comenzarán a ser motivo de consulta en los próximos días.
El pediatra destacó que hay factores que influyen en la aparición de los síntomas.
"Los factores que aumentan los síntomas son polen en suspensión, ácaros, pelos de mascotas, contaminación ambiental y cambios bruscos de temperatura. Los síntomas más frecuentes en niños son estornudos, nariz congestionada y tapada, picazón y secreción en ojos, con lagrimeo y enrojecimiento, molestia en la garganta con dificultad para tragar, tos seca persistente y fatiga", resaltó el profesional.
Las afecciones a nivel respiratorio no son las únicas que aparecen en esta época. La piel también padece los cambios de temperatura.
"A nivel de la piel, los niños suelen presentar un brote o urticaria característico, con signos de inflamación y prurito (picazón)", advirtió Muratore.
Sin embargo, con excesivos cuidados, los cuadros podrían reducirse y las complicaciones podrían evitarse. Sobre este punto, el médico sentenció: "Como medidas de prevención, evitar la exposición al viento y al polen, ventilar los ambientes, evitar alfombras, peluches y elementos que acumulen polvo. En caso de erupción cutánea, los baños con agua tibia y jabón neutro suelen aliviar los síntomas. El talco mentolado y las ropas de algodón ayudan al tratamiento".
La importancia de la consulta a tiempo
El Dr. Ángel Muratore consideró necesario visitar al médico ante la presencia de los molestos síntomas, ya que todo cuadro, con un tratamiento acertado y oportuno, podría reducir considerablemente los síntomas a corto plazo e incluso prevenir complicaciones en la salud del paciente.
"Consultar de inmediato si el niño presenta dificultad respiratoria, labios azulados (cianosis) o un silbido al respirar; ojos muy hinchados o dermatitis severas, o si los síntomas persisten pese a las medidas preventivas. Siempre es importante recordar la importancia de no automedicar ni demorar la consulta de los pequeños", cerró Muratore, sobre la necesidad de no dar medicamentos sin prescripción previa.
