Se trata de un tratamiento con medicamentos que reduce drásticamente la producción de hormonas sexuales y la libido.
Castración química, el castigo histórico para un delincuente sexual en Luisiana Castración química, el castigo histórico para un delincuente sexual en Luisiana
En un caso sin precedentes, un delincuente sexual reincidente de 37 años, Thomas Allen McCartney, fue sentenciado a una pena de 40 años de prisión, a la que se suma una medida punitiva histórica en el estado: la castración química.
McCartney aceptó someterse a este tratamiento médico como parte de un acuerdo judicial para evitar una condena mayor. Su caso es el primero en aplicarse bajo una nueva ley estatal, vigente desde agosto de 2024, que permite este tipo de castigo.
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La castración química, a diferencia de la castración quirúrgica, no es una operación. Se trata de un tratamiento con medicamentos que reduce drásticamente la producción de hormonas sexuales y la libido. Aunque no es una cirugía, sus efectos son permanentes y buscan impedir que el condenado vuelva a cometer delitos sexuales, especialmente contra menores.
La sentencia contra McCartney marca un hito en la justicia de Luisiana, estableciendo un precedente en el uso de la castración química como herramienta para prevenir la reincidencia en crímenes de esta naturaleza, detalla Radio Mitre.
