El Departamento de Criminalística del MPA secuestró 206 elementos, entre ellos cuchillos de distintos tamaños, machetes, sierras y un facón en apariencia limpio que, tras el análisis, reveló un rastro de ADN en la unión entre la hoja y el mango.
Hallaron dos nuevos perfiles de ADN en la casa del presunto asesino serial de Jujuy Hallaron dos nuevos perfiles de ADN en la casa del presunto asesino serial de Jujuy
La investigación sobre el presunto asesino serial de Jujuy sumó un dato estremecedor: los peritos identificaron dos nuevos perfiles de ADN en los restos hallados en la vivienda de Matías Jurado, principal sospechoso del caso.
El Ministerio Público de la Acusación (MPA) confirmó que dichos perfiles no coinciden con los familiares de los hombres denunciados como desaparecidos. Esto refuerza la hipótesis de que se trataría de otras dos víctimas aún no identificadas.
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A mediados de agosto, la Justicia había logrado identificar a dos de los desaparecidos cuyos restos fueron encontrados en la casa de Jurado: Sergio Sosa (25) y Jorge Anachuri (68). Ambos habían sido captados por las cámaras del Centro de Monitoreo subiendo a un remís junto al sospechoso.
Por otra parte, continúan las investigaciones para dar con el paradero de Miguel Ángel Quispe (60), Juan Carlos González (60) y Juan José Ponce (51). Sin embargo, los recientes estudios forenses descartaron que los nuevos perfiles pertenezcan a alguno de ellos.
Restos de sangre y objetos secuestrados
Los perfiles de ADN fueron obtenidos de unas manchas de sangre encontradas en una sábana utilizada como cortina en la habitación de Jurado y en una bolsa de arena ubicada en el comedor. Tras cotejar los resultados con dos familias que buscaban a sus desaparecidos, las comparaciones dieron negativo.
El 31 de julio, cuando la Policía allanó la casa del sospechoso en Alto Comedero, entre Fraile Pintado y Las Rosas, hallaron escenas escalofriantes: manchas de sangre, restos óseos y cabellos en platos para perros, junto a huesos humanos calcinados en el patio y en un tacho con combustible. También incautaron gran cantidad de ropa.
En total, el Departamento de Criminalística del MPA secuestró 206 elementos, entre ellos cuchillos de distintos tamaños, machetes, sierras y un facón en apariencia limpio que, tras el análisis, reveló un rastro de ADN en la unión entre la hoja y el mango.
Además, con pruebas de luminol, los especialistas detectaron que varias superficies de la casa habían sido limpiadas: una mesa, una heladera, sillas y otros muebles mostraron rastros de sangre.
Hasta ahora, los investigadores solo han analizado el 20% de todo el material secuestrado, por lo que se esperan nuevos resultados que podrían revelar más víctimas y ampliar la magnitud del caso.
