"Estaba ansioso y quería mi gol", dijo el delantero santiagueño una vez finalizado el encuentro.
Maher Carrizo: "La jugada de los goles la practicamos muchos y salieron en esta final" Maher Carrizo: "La jugada de los goles la practicamos muchos y salieron en esta final"
El delantero santiagueño Maher Carrizo fue una de las grandes figuras de Vélez en la final de la Supercopa Argentina, donde el conjunto de Liniers se impuso por 2 a 0 a Central Córdoba en el estadio Gigante de Arroyito. El joven atacante, que venía de destacarse en los últimos partidos, fue protagonista directo en los dos tantos del encuentro, al meter los centros precisos para que Jano Gordon, de cabeza, marcara el doblete que selló la consagración.
"Estaba ansioso y quería mi gol, pero creo que pude ayudar a mi equipo con dos asistencias, y eso es lo importante. No hay nada más lindo que festejar con esta gente y disfrutar con las familias", expresó Carrizo al término del partido, todavía con la emoción a flor de piel.
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El delantero reconoció que las jugadas de los goles no fueron casualidad, sino producto del trabajo en la previa. "Sí, la verdad que sí, lo habíamos practicado ayer en el entrenamiento. Son jugadas preparadas y contento porque hoy salieron. Me pone muy feliz también por Jano, que estuvo fino en la definición", destacó.
Sobre la sociedad que comienza a consolidar con Gordon, Carrizo señaló: "Él me decía en la previa 'Maher está picante por la banda', y bueno, yo traté de hacer lo mío. Hoy él me cuidó la espalda y después hizo los dos goles. Esto es de los dos, del equipo en general. Estoy agradecido a Dios y a mis compañeros".
Más allá de la conquista, Carrizo no escondió sus sueños a futuro. "Ya junté un par de títulos, pero sueño con jugar el Mundial, con la Selección. Eso es lo más lindo que hay y vamos a prepararnos para eso", confesó con ambición.
El joven santiagueño, que tuvo en la tribuna a su familia acompañándolo, no quiso olvidarse de ellos ni de los hinchas velezanos. "Agradecerle totalmente a toda la gente que vino y a los que alentaron desde sus casas. Soy muy feliz y todo esto es para ellos. Y sí, mi familia vino a alentarme, estaban ahí en la tribuna, así que este título también es para ellos", cerró emocionado.
Con apenas 19 años, Maher Carrizo atraviesa un presente de ensueño. Sus centros quirúrgicos definieron una final y lo colocaron en la vidriera grande del fútbol argentino. Su nombre empieza a sonar fuerte, y con actuaciones como la de anoche, Vélez puede ilusionarse con tener en casa a una de las promesas más destacadas del país.








