Alvarado: el santiagueño detrás del sonido de Milo J

Cuando uno repasa el recorrido de Santiago Alvarado, queda claro que se trata de un músico que no sólo domina múltiples instrumentos, sino que ha aprendido la música en su sentido más amplio. Este santiagueño —de raíces profundas en la tierra de poetas y cantores— ha escalado desde los escenarios de provincia hasta las grandes producciones que hoy marcan el pulso de la música latinoamericana.

Su salto internacional llegó con su participación en la "Shakira: Bzrp Music Sessions, Vol. 53", la explosiva colaboración entre Bizarrap y Shakira que batió récords globales. Pero lejos de conformarse, Alvarado amplía ahora su horizonte como productor del flamante álbum de Milo J, "La vida era más corta", una obra que fusiona la raíz folklórica con la modernidad.

"Esta es una oportunidad muy grande, es un honor, porque es música que me da la oportunidad de hacer lo que me gusta en un género que antes no lo hacía", dice Santiago Alvarado en diálogo con EL LIBERAL.

Aunque el músico ya había lanzado canciones propias, su mayor talento reside en aportar lo que sabe a las producciones de otros: el instrumento, el arreglo, la textura, la idea de fusión.

"Si bien ahora ya van como cuatro o cinco años que estoy en este género musical, para mí era nuevo. Así que es realmente un privilegio estar con diferentes artistas que representan muchísimo a la cultura de hoy", reconoce.

En "La vida era más corta", el álbum que produjo junto a Tattol, su aporte fue clave para crear un puente entre lo ancestral y lo contemporáneo, combinando instrumentación folclórica con beats urbanos y estructuras modernas.

"Para mí era una hermosa oportunidad porque Milo me decía que quería utilizar tintes y herramientas folclóricas. Entonces fue el momento de aprovechar que vengo de ahí, del género del folclore… me he criado haciendo eso", explica Alvarado. Y suma: "He acompañado como ocho años al Padre de la Chacarera, Don Carlos Carabajal, en los escenarios. Mucha música folclórica, siempre. Fue una gran satisfacción poder volcar todo eso en este disco".

El resultado fue inmediato: La vida era más corta se ganó al público y la crítica.

Sobre su vínculo con Milo J, Santiago recuerda: "A Milo lo he conocido, no recuerdo si haciendo Dispara con Nicki Nicole y él, o tal vez con la Music Session de Milo. Nos habíamos juntado en Buenos Aires y luego en España, donde estuvimos cinco días seguidos haciendo canciones. Es un talento indiscutido. Tiene una edad tan corta y te deja con la boca abierta por lo que escribe y sus ideas".

Esa admiración se tradujo en una sociedad artística sólida. "La vida era más corta la empezamos a cranear hace un año y medio o dos, y verlo crecer así, con tan solo 19 años, es realmente espectacular. Se lo merece completamente", destaca.