Fiscal Gómez se reúne con psiquiatras de El Polear y define la indagatoria, o no, de la filicida bandeña

El fiscal Mariano Gómez se trasladará hoy al Centro de Salud Mental El Polear, en La Banda, resuelto en tomar declaración indagatoria a María de los Ángeles Russo (28), quien el jueves 30 de octubre habría suministrado cuatro pastillas de Clonazepam y sofocado hasta la muerte, a su hija Diana Gómez Russo, de 9 años.

El epicentro fue la casa familiar en calle Hipólito Yrigoyen al 500 del Bº Palermo, La Banda. Según se desprende de las actuaciones policiales, María de los Ángeles le tapó la boca y le quitó la vida a la nena, generando un shock generalizado en toda la provincia.

De los informes preliminares, trascendió que la sospechosa padecería esquizofrenia, un cuadro cuyos primeros destellos irrumpieron a muy temprana edad: a los 7 u 8 años.

Trastorno mental

La esquizofrenia es un trastorno mental grave que se caracteriza por una importante deficiencia en la forma en que se percibe la realidad. Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), a escala mundial afecta a aproximadamente 24 millones de personas, es decir, a 1 de cada 300 personas.

Igual, aclara: "En los adultos, la tasa es de 1 de cada 222 personas (0,45%) y lo más frecuente es que aparezca al final de la adolescencia o entre los 20 y los 30 años, y en los hombres suele manifestarse antes que entre las mujeres".

La investigación

Hoy, el fiscal mantendrá una reunión con los expertos que monitorean a la paciente desde el jueves. Un vocero descartó anoche que sea posible indagarla, ya que aún no respondería a la medicación y el tratamiento requiere continuidad.

Vale clarificar que la joven no recibía su medicación al momento del crimen. Es decir, su cuadro sería más que delicado por un presunto brote psicótico.

En El Polear, Gómez (foto) mantendría una reunión con los profesionales a cargo de la paciente. Trascendió que la seguridad interna realiza "rondas" continuas, ya que hoy todo es ilógico, volátil e imprevisible en ella. Afuera, es vigilada con custodia policial, medida coordinada entre la Fiscalía y la comisaría jurisdiccional.

Despierta, en la oscuridad

De los testimonios provistos por sus progenitores a la Justicia, se desprende que la mujer presentaría una mente desconfigurada: por ejemplo, se supo que el padre se despertaba por las noches y María de los Ángeles los observaba, imposibilitada de conciliar el sueño.

También, trascendió que en los últimos días lucía muy enojada. Le habrían regalado un celular, pero lo roció con alcohol y lo destruyó, prendiéndole fuego. Ello fue manifestado a la Justicia por su familia.

Finalmente, el jueves todo mutó en horror y desolación. Con sus padres descansando, María de los Ángeles habría sofocado manualmente a su hija. Al despertar, los otros adultos se dieron con el cuadro tétrico. "Le di Clonazepam para que se muera", habría balbuceado y afirmado ante los enfermeros y policías, tras poblar la vivienda con los abuelos quebrados en llanto.

Una batería de pericias y análisis en pleno proceso 

El sábado 1 de noviembre (por la tarde), la vivienda del Bº Palermo quedó en posesión de los padres de la filicida (persona que mata a su hijo).

Los voceros confirmaron que los peritos ya terminaron con todas las medidas de rigor y que ahora las conclusiones demandarán tiempo.

Por ejemplo, hay trabajos sobre la distribución de las habitaciones; una delimitación del sector en que la mujer dio muerte a su hija; el otro asignado a los abuelos de la víctima.

Estudios de sangre

También, fueron encomendados a los profesionales en química estudios de sangre y las características de las pastillas suministradas por la progenitora a la pequeña. A ello se añaden informes -por venir- sobre el efecto del Clonazepam y su rol en el triste fin de la menor.

Una vez obtenidas todas las respuestas emanas de la ciencia, el fiscal podrá arribar a una certeza contundente, confió su entorno.

Para entonces, también los expertos en salud mental le informarán si María de los Ángeles es, o no, imputable, lo crucial para la Justicia.

Tres muertes y dos homicidas declarados inimputables

En el 2011 y en el 2018 fueron cometidos tres crímenes, cuyos autores resultaron personas con esquizofrenia. Detallamos las historias a continuación:

Bº PRIMERA JUNTA: El 3 de septiembre del 2011, Ariel Esteban Mansilla compró un rifle y provocó una masacre. A su hermana Claudia Mabel Mansilla, de 35 años, la mató de un tiro en el corazón. A su sobrina, de 6 años, de un disparo a la cabeza. Sólo sobrevivió su otra sobrina de 3, a quien llamaba mi "Negrita".

El horror literalmente se "desató" en una casa y mientras todos dormían. El hombre no huyó. Llamó por teléfono a su familia y esperó en la casa. Después de múltiples pericias y test psicológicos, se estableció que Mansilla era inimputable. Internado en el Hospital Diego Alcorta, falleció el 26 de septiembre del 2016

Bº JUAN F. IBARRA: El 23 de octubre del 2018 fue perpetrado otro asesinato, pero en el Bº Juan Felipe Ibarra. La víctima resultó Juan Rubén Rodríguez (74) quien vivía postrado en una habitación en los fondos de la casa, desde hacía 7 u 8 años.

De madrugada, Julio Ramón Galeano, de 31 años, también con esquizofrenia y problemas de adicciones, habría tomado un cuchillo. Fue a la habitación, degolló al anciano

Su entorno informó luego a la policía que anduvo despierto toda la madrugada y a las 7 lo "corrieron" a dormir. Otra fuente indicó que estuvo buscando las pastillas para la esquizofrenia, dejando entrever que se medicaba normalmente.

Conclusión, en un interin habría degollado al anciano. Luego, habría lavado el cuchillo y colocado con el resto de la vajilla. A media mañana, cuando cocinaron el almuerzo, se utilizó el cuchillo y adiós al ADN de la víctima. Finalmente, Galeano fue apresado y después internado en un centro de salud mental.