La abogada recibió un llamado y en menos de cinco minutos, vaciaron su cuenta bancaria, de sueldos y de tarjeta Naranja. Denuncias y operativos.
Presidiario cordobés lidera banda que estafó en casi $8 millones a una funcionaria judicial de Santiago del Estero Presidiario cordobés lidera banda que estafó en casi $8 millones a una funcionaria judicial de Santiago del Estero
Una funcionaria santiagueña fue estafada en casi $ 8.000.000, bajo la modalidad phishing, y la Justicia desbarató a la banda responsable del ilícito, liderada por un presidiario que purga una condena en una cárcel de Córdoba.
"El phishing es un tipo de ciberataque en el que los delincuentes se hacen pasar por una entidad de confianza (como un banco, una empresa o una red social) para engañar a las personas y robar su información confidencial, como contraseñas, números de tarjeta de crédito y datos bancarios. Los ataques suelen realizarse a través de correos electrónicos, mensajes de texto (smishing) o sitios web falsos".
De acuerdo con la investigación que lleva adelante la fiscal Celia Mussi, la denuncia por este hecho fue interpuesta en agosto pasado.

Según la damnificada, la llamaron por teléfono. Del otro lado de la línea, una mujer le informó que era integrante del departamento de Ciber Seguridad de Mercado Pago. En síntesis, revelaron que adeudaba varios millones por compras de electrodomésticos en Buenos Aires.
La santiagueña habría respondido que desconocía tal deuda. Insistente, la mujer delincuente reforzó su discurso y en minutos persuadió a la damnificada que se trataba de un rojo pasivo que no debía ignorar.
Acto seguido, la desconocida obtuvo las credenciales del home banking de la funcionaria y posterior acceso a sus cuentas bancarias y tarjeta de crédito. Así, la banda perpetró una estafa de casi $ 8.000.000.
Las transferencias iniciales -no consentidas- fueron destinadas a las cuentas de Julio César Córdoba, Florencia Suárez de Marchi y Oscar Hilario Suárez, dando inicio a la cadena de movimientos delictivos. Los otros eslabones serían seis sujetos más y sobre tres hay órdenes de detención, con firma del juez de Control y Garantías, Rodolfo Améstegui (foto).

En Buenos Aires
De acuerdo con la investigación, Delitos Económicos coordinó con sus pares de Córdoba. En las últimas 72 horas fueron apresados Julio César Córdoba, Axel Ignacio Quintero, Vanesa Rosales y Cynthia Sosa.
En forma paralela, la Justicia allanó varios distritos en la provincia de Buenos Aires, pero tres sospechosos más de la banda alcanzaron a burlar el cerco policial.
Para los expertos informáticos, el cerebro se encontraría preso. La carátula de la causa es "Oscar Hilario Suárez y otros por presunto delito de estafa", destacaron voceros de la investigación, los que confiaron que los dineros de la funcionaria fueron retirados desde el banco y el sitio de la tarjeta. Luego, enviados a otras cuentas, pero no privativas de los cuatro detenidos, quienes eran esperados al cierre de esta edición en esta capital.
Denuncias Penal y en Defensa al Consumidor, en contra de Naranja
Siempre en base a la investigación, trascendió que todas las personas que formaron parte del círculo delictivo (mujeres y hombres) tendrían tarjeta Naranja. ¿Por qué? Las transferencias partieron a sus cuentas y la recepción fue inmediata.
Ya interiorizada de las operatoria, la funcionaria habría interpuesto denuncias en Defensa al Consumidor, pero también Penalmente.
En sus escritos, la damnificada habría requerido una exhaustiva investigación y subrayado lo endeble de su seguridad, tanto que los maleantes vaciaron su cuenta en escasos minutos y sin que se pusieran en alerta los mecanismos internos de seguridad, enfatizaron los voceros al cierre de esta edición.
Tres prófugos forzados a borrarse de sus domicilios
La Fiscalía ya tendría armado el esquema delictivo del grupo interprovincial, pero anoche no aparecían tres eslabones clave: es más, arrancó la danza de abogados, resueltos en blindarlos con potenciales eximiciones de prisión.
Del entrecruzamiento de teléfonos, se supo que primero entró en acción el presidiario. Luego, compañeros de celda y al parecer familiares suyos.
Luego, los dineros fueron girados a una decena de cuentas, desplegadas en Córdoba y en la provincia de Buenos Aires, domicilios que fueron allanados en las últimas horas.
Tecnología clave
La tecnología delató la lluvia de pesos que fue inmediata a que la funcionaria colgara el teléfono. Cuando la misma descubrió que se trató de una vil treta, informó todo al banco y a Naranja.
Sin embargo, los dineros habían sido retirados y reenviados hacia otras cuentas, esas que guiaron ahora a la Justicia en la firma de siete allanamientos.
Con la misma inmediatez, Mussi y su equipo reelaboraban anoche una estrategia, tras los tres prófugos ya a sabiendas que son buscados por la estafa a la santiagueña y optimistas en que sus cómplices no los manden al frente.








