Sólo hay dos situaciones en las que se comprobó la eficacia del cannabis

Ante la creciente expectativa de la población en relación al uso de derivados del cannabis en el tratamiento de las enfermedades neurológicas, la Sociedad Neurológica Argentina comunica sobre los mitos y verdades de este producto.

Advierten que “el cannabis contiene alrededor de 120 compuestos farmacológicamente activos, de los cuales se han reconocido e investigado especialmente dos, el THC, responsable de los efectos cognitivos y de sensopercepción, y el Cannabidiol que no presenta propiedades psicoactivas”.

Además sostienen que ‘se ha demostrado recientemente que el Cannabidiol tiene efectos terapéuticos en algunas epilepsias de difícil manejo, tales como el Síndrome de Dravet y de LennoxGastaut. Al mismo tiempo, se están realizando diferentes estudios clínicos que brindarán información más calificada acerca de la eficacia y/ o seguridad para el tratamiento de otros tipos de epilepsias’.

Mediante un comunicado, la Sociedad Neurológica Argentina sostiene además que ‘también un derivado del cannabis, el Nabiximols en forma de spray bucal, ha demostrado eficacia para el tratamiento de la espasticidad moderada o grave debida a la esclerosis múltiple (EM), que no ha respondido de forma adecuada a otros medicamentos antiespásticos. No existen en la actualidad preparados de Nabiximols aprobados en la Argentina ni su uso está contemplado, al momento actual, en la normativa del régimen de excepción, mediante el cual la Administración Nacional de

Medicamento, Alimentos y Tecnología Médica (Anmat) autoriza la importación del producto’.

Y agrega que ‘no existe, evidencia actual concluyente en relación a su eficacia en ninguna otra enfermedad neurológica’.

Es por esto, que la Sociedad Neurológica Argentina recomienda a la población el uso de Cannabidiol en las formas de epilepsias mencionadas anteriormente, en las que el Cannabidiol ya ha demostrado ser eficaz, debe utilizarse en todos los casos, bajo la supervisión del médico tratante, y siempre con la autorización para su uso; el uso de derivados del cannabis en cualquier otra indicación terapéutica, debe realizarse únicamente en el marco de estudios clínicos adecuados para establecer eficacia y seguridad. Finalmente, deben contar en todos los casos con la autorización de los comités de ética acreditados y de la autoridad de aplicación correspondiente.l