Dolar Oficial: - Dolar Blue:- Dolar CCL:- Dolar Bolsa: - Dolar Mayorista: -

EL LIBERAL . Opinión

El orgullo de ser segundo

15/12/2019 07:54 Opinión
Escuchar:

El orgullo de ser segundo El orgullo de ser segundo

Por Germán Robato.

“El segundo es el primero de los perdedores”, patentó Carlos Bilardo, el entrenador más exitoso que tuvo la selección nacional si uno se guía sólo por el resultado final, generando un mensaje, a todas luces reduccionista, exitista y perturbador, que por desgracia, parece estar arraigado en buena parte de nuestra sociedad.

No necesitó decir nada el “Sapito” Coleoni tras perder ante River la final de la Copa Argentina para hacer trizas esa ‘teoría’: su beso sentido a la medalla por el segundo puesto se hizo viral y les recordó a muchos que el camino a ese partido decisivo, las formas y la actitud, valen tanto o más que los flashes que se lleva el campeón.

¿Perdedor Central Córdoba? ¿Perdedor un equipo que hace 2 años atrás jugaba el Federal A y durante 45 minutos se paró dignamente ante el mejor equipo del Continente? Dificilmente el Kily Vega, Vera Oviedo, Jonatan Herrera y compañía se sientan hoy perdedores. Más bien deben tener el pecho inflado de orgullo, como lo tienen esos más de 8 mil santiagueños que hicieron mil y pico de kilómetros para asistir a un partido histórico y agradecerles a los suyos este hermoso cuento vivido.

Claro que vale besar esa medalla y no sacársela; claro que hay que darle el enorme valor que tiene porque dignifica, estimula y es un premio enorme. Me cuesta encontrar argumentos y motivos, siguiendo la teoría bilardista, que me justifique en Central Córdoba es el mejor de los perdedores.

En la vida

Nuestros hijos ganan en la escuela porque aprenden, no por tener la libreta llena de 10, aunque claro que a todo padre lo llena de orgullo algo así. Pero lo verdaderamente importante es el aprendizaje, su formación, no una nota. Si les enviamos otro mensaje sólo logramos frustrarlos si el resultado es distinto. Un 7, un 8 o un 9 no es una nota de perdedor y eso es lo que debemos transmitir.

Una persona no mide su éxito sólo porque le vaya bien en un negocio; en el camino seguramente tiene tropiezos que forman parte del aprendizaje y que hay que saber superar. Allí también hay un éxito.

Los ejemplos pueden ser miles y en el deporte sobran: ¿son perdedores Scola, Campazzo y Deck por haber sido subcampeones del mundo este año en China? ¿de verdad alguien cree que Nadal, Federer o Djokovic son los mejores perdedores cuando no están en la cima? Si a los segundos le colgamos el cartelito de ‘perdedores’ ¿Qué le queda al resto? Esto es lo más peligroso de esta concepción de la vida: que frustra a muchos, que no enseña a valorar el esfuerzo para conseguir algo y que solo mide un resultado.

Este 2019 de Central Córdoba será inolvidable por siempre y cuando pasen los años, se recordará aún con más orgullo. Con la simpleza que siempre tiene, el Sapito dijo ‘ganamos el segundo puesto’ y no hubo mejor definición que esa para justificar ese beso a la medalla y la hidalguía de todo su plantel. Nos dieron una lección que trasciende al deporte y que debe servirnos para valorar no sólo la meta, sino también el recorrido hacia ella.  


Lo que debes saber
Lo más leído hoy