Como en caso de Fernando Báez Sosa, pedirán pericia scopométrica en el crimen de Franco Rábago

La querella solicitará que la policía Federal realice una pericia scopométrica al cuerpo del joven Franco Rábago, asesinado en noviembre del 2019, idéntica a la que se impulsa por el brutal asesinato de Fernando Báez Sosa, en Villa Gesell, por el cual hay diez rugbiers presos.

Por la muerte del santiagueño la Justicia dictó la prisión preventiva de Ignacio López (20) y Esteban Acuña (18), a quienes la fiscal María Alejandra Holgado acusó de sellar su triste fin.

Rábago, de 20 años, habría sido brutalmente golpeado el 18 de noviembre en inmediaciones de Avenida Colón y Castelli. Se cree que hubo una pelea anterior en un local bailable y luego, López y Acuña atacaron a Rábago en la calle.

De acuerdo con el querellante, Javier Leiva, los individuos habrían apaleado a Rábago y fue tal la magnitud de los golpes que la víctima dejó de existir en el Hospital Regional, días después.

Ahora, Leiva confirmó que recurrirá a la Fiscalía y Policía Federal: “Nuestro propósito es la concreción de una pericia scopométrica”, adelantó, ya que Rábago habría recibido trompadas y patadas en distintas partes del cuerpo.

La scopometría es la disciplina compuesta de técnicas y procedimientos derivados de la física, basados en la observación y la medición, aplicadas a comparaciones entre dos o más objetos de estudio con fines de identificación. Actualmente se utiliza el término para designar una División de la Policía Federal Argentina y al método iniciado en la misma.

El estudio busca analizar la huella que dejó la o las zapatillas sobre el cuerpo de Rábago.

En la práctica, se analizarán huellas y se comparará, en este caso, la “impronta” que haya dejado una zapatilla en la piel de la víctima.

Para la defensa, los agresores nunca quisieron matar al joven

Los dos acusados por la muerte de Rábago siguen privados de la libertad y sus abogados afirman que fue una pelea sin ánimo de matar.

Por ende, desde el 2019 el debate se focaliza entre un “homicidio simple”, o bien un “homicidio preterintencional”.

Para la Fiscalía y la querella, los agresores sabían bien la dimensión de sus golpes.

Por el contrario, los defensores Sergio y Sebastián Brandán estiman que sus clientes deberían ser acusados de “homicidio preterintencional”, según indicaron en la investigación.

La diferencia

Sintetizaron su criterio con un ejemplo. En una discusión, dos personas se pelean a trompadas, una cae por un golpe, se da la cabeza contra el piso y eso le provoca la muerte. El golpe de puño se puede considerar como un medio que razonablemente no debería producir la muerte; y que la intención del autor era golpear para producir un daño, y no matar.

Por eso, el resultado que se provoca, es decir la muerte, va más allá de la intención original del acusado.

En resumen, un medio que no debía matar y una intención que era dañar solamente.

Sin embargo, sopesó el criterio de la fiscal y la querella. El 13 de enero, el juez de Control y Garantías, Rodolfo Améstegui, dictó la prisión preventiva por “homicidio simple”.l