Gallardo quiere estirar la paternidad en el mano a mano

A Marcelo Gallardo, jugar contra Boca Juniors “mano a mano” le sienta bien. Y las estadísticas son más que elocuentes: de los seis enfretamientos entre ambos clubes para definir una instancia, ganó en cinco y apenas perdió uno.

El primero de los triunfos fue en la semifinal de la Copa Sudamericana 2014. Tras el 0-0 en la ida en la Bombonera, Barovero se agigantó en el inolvidable penal ante Gigliotti y más tarde, Leo Pisculichi frotó su zurda para sacar un remate que hizo estallar al Monumental.

Un año después, llegó uno de los superclásicos más polémicos de los últimos años y que quedó en la historia por un triste episodio. En la ida de octavos de la Libertadores 2015, River ganó 1-0 en Núñez (gol de Carlos Sánchez, de penal) y en la vuelta en la Bombonera, tras el 0-0 en los primeros 45”, el equipo se vio afectado por el gas pimienta que tiraron desde la popular de Boca y el encuentro fue suspendido (se le dio por ganado al Millo por 3 a 0).

a tercera no fue la vencida para Boca. Tras 42 años, ambos clubes volvieron a encontrarse en una final y River se quedó con la Supercopa Argentina 2017: con goles de Gonzalo Martínez y Nacho Scocco, fue 2-0 en el Malvinas Argentinas de Mendoza. Y luego, el gran reencuentro se dio en 2018 y la película es conocida y con un final eterno: tras el 2-2 en la Bombonera y el repudiable incidente con el micro de Boca, de la mano de Pratto, del zurdazo de Juanfer Quintero y de la corrida del Pity, el equipo de Gallardo se quedó con una Libertadores irrepetible.

Un año más tarde, volvieron a verse las caras en otro duelo copero: por las semis de la Libertadores 2019, River sacó ventaja en el Monumental con un contundente 2-0 (Nacho Fernández y Rafael Santos Borré) y en la vuelta, a pesar del 0-1 (Hurtado), el club de Núñez sumó un nuevo festejo en la Bombonera.

Finalmente, el último duelo se lo quedó Boca: fue por los cuartos de final de la última Copa LPF, encuentro en el que River sufrió bajas importantes por el brote de Covid y tuvo que jugar con muchos pibes, como el arquero Leo Díaz. Tras el 0-0 en los 90”, el equipo de Russo ganó 4 a 2 por penales.