La novia de Calamaro cuenta cómo la conquistó La novia de Calamaro cuenta cómo la conquistó
“Nos conocimos en el recital, aparecí de casualidad arriba del escenario. Había chicas subiendo para bailar ¡y yo me tiré de cabeza porque sí! ¿Cómo no me iba a subir? Capaz que no era la canción de Las Tres Marías, tipo cumbia, ¡subía al escenario y revoleé como loca!”, explicó la oriunda de Lanús a una revista sobre el famoso recital de Chile en el que la fotografiaron.
Según ella, ese encuentro, que terminó con el matrimonio de Calamaro con Julieta Cardinali, fue el primero, pero después el músico la buscó. “Los hombres cuando te quieren rastrear, saben cómo hacerlo. Andrés manda buenas flores y bombones. Pero es realmente bueno escribiendo y, de alguna manera, en este mundo tan cibernético, te encuentran por Facebook, e-mail, Twitter. Todos somos encontrables, entonces cuando me llegó ese texto bien escrito, me volví loca. Ahí me emocioné. Era un halago, un piropo. Si te llega un piropo no convencional bien escrito, es la clave, ¡chicos, esa es la clave!”, reveló.
Chica Playboy
Breque, además de modelo, fue secretaria del ciclo “Canta conmigo Argentina” y sorprendió a sus padres cuando protagonizó varias series del canal “Playboy TV”: “Pobre mi vieja, se agarra la cabeza cada dos por tres, porque yo no tengo pudor, ¿entendés? Siempre me dice: ¡Ay Miqui, te voy a matar! A esta altura, ya está curada de espanto”.
Micaela no se calla nada, y cada vez se muestra más suelta, más confiada con el lugar que ocupa en el mundo del espectáculo.
“Estoy rayada. Soy una loca linda. Lo primero en mi vida es la lealtad con la familia, con los amigos, la diversión, esos conceptos los quiero para toda la vida, pase lo que pase. Quiero tener 50 años, ¡y hacer Playboy de vuelta!”, completó.
Por último, se refirió a la diferencia de edad en la pareja: “Lo único que podría hacer con un chico de veintipico es ir a la cancha, que me encanta. Soy de River Plate. Andrés es de Independiente, pero lo voy a transformar, todos los hinchas del Rojo me van a odiar, pero ¿saben qué? ¡Lo siento mucho y no me importa nada!”.
