"Chocota" Trejo hizo feliz a los chicos "Chocota" Trejo hizo feliz a los chicos
Además de hacer lo que más les gusta, jugar a la pelota, pudieron compartir un rato con Oscar Guido Trejo, más conocido como “Chocota”, que no se cansó de firmar autógrafos y sacarse fotos.
La intención del jugador del Sporting Gijón de España fue devolver un poco del cariño que recibió en ese barrio durante su niñez. Y vaya si lo logró. Los chicos se fueron muy contentos porque además recibieron un refrigerio y, como broche de oro, se sortearon gorros, remeras y camisetas de “Chocota” y una de Francisco Cerro, de Vélez, quién no pudo estar por otros compromisos, pero hizo llegar su casaca.
“Esto es algo que a mí me hace feliz. Yo cuando era chiquito estaba jugando aquí y el Pelado (Sebastián Pérez) estaba jugando en la Primera de Boca. Cada vez que venía a comprar pizza en casa, para mí era un sueño poder sacarme una foto o abrazarlo y pedirle consejos. Eso es lo que yo quiero con ellos, que disfruten y que les alegre aunque sea una tarde”, le dijo “Chocota” a EL LIBERAL, con la humildad de siempre.
Luego agregó: “Aquí en esta canchita empecé a jugar, estábamos casi siempre porque aquí tengo a los amigos, la familia Casini que siempre me invitaban. Y como era cerquita de casa siempre jugábamos”.
Proyectos
Trejo adelantó uno de los tantos proyectos que tiene en mente para el 2013, siempre de la mano de su Fundación.
“En abril va a venir gente de España para realizar pruebas en Capital y el interior. Van a tratar de buscar talentos. Si pasan la prueba aquí, los llevarán a España para que conozcan la vida de los jugadores, el club y sobre todo que pasen una semana y vean lo que es allá”, manifestó.
“Chocota” reveló que estarán en nuestra provincia los directores deportivos de Barcelona, Espanyol, Sevilla y Recreativo de Huelva. “Aquí hay muchos chiquitos muy buenos que juegan y ojalá alguno pueda quedar”, se ilusionó.
“También vamos a seguir con la merienda y ojalá que podamos hacerle conocer a los chicos parte de la provincia. Además vamos a hacer otra vez el partido, pero mejor organizado y con más jugadores que van a venir a hacerme la gauchada”, completó. Para el final, contó una anécdota de su infancia. “Al frente sabíamos jugar a la taba, escondidos, a la siesta. Cuando venía de la escuela le robaba $5 a mi mami de la pizzería. Hasta que un día los changos le avisaron y cuando estaba por tirar la taba me ha venido un ‘parchazo’ de atrás, era mi mami que me dijo que vaya a limpiar la casa antes de venir a jugar a la taba”, dijo.l










