Elecciones en Santiago del Estero y el juego de las diferencias: dudas y desafíos

Este año Santiago del Estero, como todo el país, deberá ir a las urnas el 26 de octubre para votar legisladores nacionales, en las Generales. En nuestra provincia se votarán tres senadores nacionales, y tres diputados nacionales de los siete que tiene Santiago del Estero en la Cámara baja.

Este año se aprobó la suspensión de las Paso nacionales, previstas para agosto. Sin embargo, está la posibilidad de que los santiagueños también tengan que ir a votar en el octavo mes del año. 

Sucede que Santiago del Estero tiene las elecciones provinciales: gobernador y vicegobernador y 40 diputados provinciales. También habrá comicios en dos intendencias, Clodomira y Villa Atamisqui (intendente y concejales) y en 136 comisiones municipales. 

La cuestión es que a nivel nacional se utilizará por primera vez el sistema de boleta única de papel, donde van los candidatos de todos los partidos y alianzas, en la misma boleta. Pero para la elección local: la boleta partidaria tradicional para las locales (formato sábana, con cada categoría en un cuerpo distinto). Por otro lado, se estrenará la boleta única de papel (BUP) para las legislativas nacionales. 

El gobernador Gerardo Zamora manifestó que la idea es que las elecciones sean concurrentes, el mismo día. Sin embargo, no quiere que al votarse con dos sistemas distintos el mismo día, se produzcan las demoras, como ocurrió en las Paso de 2023 en CABA cuando se votaron los precandidatos nacionales y también los cargo para jefe de gobierno porteño. Por eso, la Provincia hizo la consulta a la Cámara Nacional Electoral a través del juez electoral federal Guillermo Molinari, para ver la posibilidad de reducir la cantidad de electores por mesa. Hay un techo de 350, la idea es llevarlo a la mitad. 

Si la Cámara Nacional Electoral da lugar, habrá que ir a votar cargos nacionales y provinciales (y comunales) el 26 de octubre. De lo contrario, ya anticipó el mandatario provincial, los comicios provinciales se celebrarán en agosto. 

Modalidades 

Amén de la decisión de la Justicia Electoral, lo cierto es que los santiagueños vamos a votar con dos sistemas distintos. En la BUP, en el caso de Santiago del Estero, todos los candidatos, a senadores y diputados nacionales de las distintas fuerzas, irán en la misma boleta. En la fila van los cargos en disputa y en las columnas, las fuerzas políticas, identificadas por color y logo. Dentro de los casilleros de los candidatos, van las fotos de los dos primeros candidatos titulares (a senadores, y a disputados), los nombres de los candidatos titulares (de los dos senadores, y hasta el quinto lugar, para diputados). 

El tamaño de la boleta dependerá de la cantidad de categorías y de fuerzas que participen. En el caso de Santiago del Estero, en cuanto al ancho, las boletas que contuvieren hasta 10 listas o menos tendrán una extensión total de 25,98 cm. 

En cuanto al alto, las boletas con 2 categorías de cargos a elegir tendrán una extensión total de 21,86 cm que es el caso de Santiago el Estero. Por antecedentes, no suelen pasar de 10 las fuerzas que se presentan en Santiago del Estero para cargos legislativos nacionales, indicaron en la Secretaría Electoral Federal. 

Procedimiento 

Para el caso de la votación con la BUP, el elector se presenta con su documento en la mesa que le corresponde votar. Allí la autoridad de mesa le entregará una boleta con su firma. El votante deberá dirigirse con la boleta hasta un biombo o cabina, donde con una lapicera con tinta indeleble que le darán las autoridades, deberá marcar con una x, los candidatos elegidos en cada categoría, o bien, no marcar ninguno, lo que se tomará como voto en blanco. Si pone más de una x en la misma categoría, se anula. 

La BUP no tiene sobre, sino que luego se pliega hacia adentro, para no mostrar la decisión del elector, y se coloca dentro de la urna. 

Dudas y desafíos 

El Gobierno provincial consultó a la Cámara Nacional Electoral la posibilidad de reducir la cantidad de electores por mesa, para evitar demoras como las que se produjeron en las Paso de CABA en 2023, cuando se usa ron boletas partidarias y la boleta única electrónica. 

Esto llevó a que la Cámara Nacional Electoral resolviera que, para las generales, las boletas para las categorías nacionales y locales fueran en un solo sobre y en una misma urna. 

De darse la concurrencia en Santiago del Estero, hay interrogantes y desafíos para la logística, y de procedimientos por parte de las autoridades electorales. 

Se tendrán que disponer más mesas, más locales comiciales (las personas tendrán que consultar el padrón por eventuales cambios), más autoridades de mesa, más efectivos para custodiar el acto eleccionario. 

En cuanto a los interrogantes, son varios: ¿qué se votará, primero, los cargos nacionales o los provinciales? Y luego, en el escrutinio definitivo, también debe definirse qué se escrutará primero. 

¿Se utilizará un solo bolsín con el material electoral, o dos? De ser dos, sería uno para cada elección (la provincial y la nacional). De hecho, por el despliegue de fiscales que implicará, el escrutinio definitivo no sería en el Juzgado Federal, sino en otro lugar como en el Fórum. Lo que ya dan por hecho en la Secretaría Electoral Federal, a cargo de Daniel Micol, es que será un escrutinio largo. 

¿Cómo actuar si un votante dijo que votó mal y quiere votar de nuevo? ¿Se permite o no?, ¿Cómo proceder con la boleta que se tenga que descartar? ¿Habrá boletas únicas de papel de contingencia? 

Además, se pondrá el celo en el uso de celulares, para evitar que el votante saque foto de su decisión, despejando cualquier riesgo de inducción en el voto. 

Todas estas consultas que la Justicia Federal Electoral tiene para hacer a la Cámara, y los desafíos planteados, se esperan queden dilucidados en un hipotético convenio que firmen la Provincia y la Cámara nacional Electoral, de realizarse, finalmente, las elecciones de manera concurrente.