Por Ilda Juárez de Paz
Este domingo de Pascua, ojalá pidamos y demos la bendición Este domingo de Pascua, ojalá pidamos y demos la bendición
En estos días de recordación de la Pasión de Cristo los ahijados piensan o recuerdan a sus madrinas o padrinos, aquellos que los recibieron en el día de su bautismo. Y surge la palabra "bendición".
Hoy es muy común escuchar que dicen:
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- Hola, ¿cómo te va? Bendiciones.
- Adiós, hasta otro día. Bendiciones.
Hermosa palabra
"Bendiciones" es una palabra bella, porque encierra un buen deseo desde el punto de vista religioso. Quizá no entendamos muy bien, pero si lo decimos con fe seguramente es una hermosa palabra y si esos buenos deseos nos llegan, con más razón.
En estos días no sabemos si los niños de hoy, los jóvenes de hoy, entienden muy bien aquello que a la generación mayor nos ha tocado vivir; como visitar a los padrinos, llevarles un obsequio y pedir su bendición, y hacerlo de rodillas, juntando las dos manos:
-Demé la bendición, madrina.
¡Qué hermoso! El Domingo de Pascua ojalá escuchemos mucho estos pedidos, pues bendecir es un acto de amor. Hagámoslo todos, démonos bendiciones como antes, cuando éramos niños.
Hoy, mayores, recordamos esos días en que nos dieron la bendición y algunas golosinas, quizá. Feliz Pascua de Resurrección para todos.