Tratándose de la muerte de un bebé de 2 meses que falleció este lunes, el hecho causó conmoción en las últimas horas, desde EL LIBERAL, se comunicaron con el abogado penalista, Diego Leguizamón quien manifestó: "la Justicia podría imputar a la madre por homicidio".
¿Qué responsabilidad podría caberle a la madre del bebé de dos meses que murió broncoaspirado? ¿Qué responsabilidad podría caberle a la madre del bebé de dos meses que murió broncoaspirado?
La muerte del bebé santiagueño que ingresó en grave estado al Centro Provincial de Salud Infantil (CEPSI) causó conmoción en las últimas horas. No solo por la temprana edad del menor (tenía apenas dos meses), sino porque, según denunciaron los médicos que lo atendieron, el niño estaba en un estado de higiene muy deplorable.
Debido a la gravedad del caso, las autoridades sanitarias dieron aviso a la Policía, que, a su vez, dio participación a la Unidad Fiscal de Violencia de Género e Intrafamiliar, y se ordenó la aprehensión de la mamá del menor, quien permanecía con custodia policial en el Hospital.
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Se trata de una joven de 20 años, de apellido Cáceres, quien ahora fallecido el bebé - enfrentará una acusación formal, y podría ser condenada por homicidio culposo si se comprueba que el niño pereció por haberse broncoaspirado.
Pero si se considera que fue por falta de atención, "la Justicia podría imputarla por 'homicidio por comisión por omisión' o por 'abandono de persona, seguida de muerte'. Ambas figuras son de naturaleza muy gravosa en cuanto a la pena en expectativa que se espera", explicó Diego Leguizamón, abogado penalista, en diálogo con EL LIBERAL.
"Si hablamos de un homicidio de comisión por omisión tiene que existir un elemento volitivo, es decir la voluntad de causar la muerte. En cambio, si es abandono de persona seguido de muerte, que es lo que más se aproxima en este caso, fue porque un deber de cuidado se ha dejado de observar por quien tenía el deber de proteger a una persona que está en situación de vulnerabilidad", sumó el letrado.
El grave hecho se conoció cerca de las dos de la madrugada de este lunes, cuando vecinos del barrio El Tuscal auxiliaron a una mujer que se encontraba sobre avenida Belgrano, gritando que su hijo despedía "espuma por la boca". Inmediatamente, el pequeño fue trasladado al Centro Integral de Salud Banda, donde fue compensado, pero debido a la gravedad de su cuadro fue derivado al CEPSI. Mientras el recién nacido era asistido, los uniformados se entrevistaron con su mamá, quien manifestó que se encontraba en la casa de su pareja sobre calle Pública y notó que el pequeño tenía problemas para respirar. La joven madre sostuvo que al querer levantarlo advirtió que el bebé "largaba espuma por la boca" por lo que lo cargó en sus brazos y corrió hacia la calle para pedir ayuda. Ya en ciudad Capital, el menor fue examinado por la médica pediatra quien informó que su estado era grave, con pronóstico era reservado. Unas horas más tarde, el bebé falleció.
"Las imputaciones que pueden caberle a la persona son: homicidio calificado por nivel de ascendente, o por abandono de persona seguido de muerte. Me inclino más por esté último, porque la criatura estaba en pésimas condiciones de higiene, según trascendió", sumó el abogado.
De acuerdo con el Código Penal, si es homicidio calificado por el vínculo (madre/hijo), la condena que corresponde es perpetua; mientras que, en el caso de abandono de persona seguido de muerte, la pena ronda entre los cinco y los quince años de prisión.
¿Existe la posibilidad de atenuantes?
Si bien el caso causó conmoción y la condena social recayó sobre la madre, como la principal culpable, el abogado explicó que "eventualmente, se podría considerar algunos atenuantes como el estado puerperal". Aunque aclaró que, de momento, es todo materia de investigación.
"El estado puerperal antes solía estar en el código penal, pero hoy en día se lo ha incorporado a las circunstancias extraordinarias de atenuación. Porque como fenómeno jurídico no está del todo reconocido. Es un estado depresivo que sufre la mujer como consecuencia del cambio hormonal que implica el caso del parto. En algunos casos puede ser más sensible que en otros, por eso no es unánime la doctrina con respecto a esta cuestión para darle ese reconocimiento", explicó Leguizamón.
Y agregó: "Se lo toma como un estado extraordinario de atenuación. Podría funcionar como un modo de atemperar un poco la pena expectativa o la que se le pueda imponer, en caso de encontrarla culpable del delito". "De momento, resta mucho por investigar", subrayó.
Maternidad y responsabilidades
Leguizamón también hizo referencia a la responsabilidad aparentemente "exclusiva" que recae sobre la joven madre, y habló sobre la falta de contención y prevención para que evitar que este tipo de tragedias sucedan.
"Aquí no está fallando solo la persona cuidadora (en este caso, la madre), sino también hay todo un aparato social porque si bien la criatura murió en el hospital, antes se debió haber alguien que debería haber puesto en conocimiento a las instituciones, que hacen al cuidado de la primera infancia", afirmó.
En ese mismo sentido, Judith Anabella Abraham, Lic. en psicología (Mp. 358), Especialista en políticas públicas de niñez, adolescencia y familia, explicó que "ante un hecho tan doloroso como el fallecimiento de un bebé, es fundamental abordar el análisis con la seriedad que merece y desde una mirada integral".
"En primer lugar continuó la especialista-, es importante señalar que la responsabilidad sobre la crianza y cuidado de los niños no puede ni debe recaer exclusivamente en la figura materna, sino que debe pensarse en términos de responsabilidad familiar, social e institucional. La Ley 26.061 de Protección Integral de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes lo establece claramente", sumó.
En ese sentido, la especialista destacó que este tipo de casos "no pueden analizarse únicamente desde la perspectiva de la conducta individual de la madre, sino también desde las condiciones de vida y los apoyos (o la falta de ellos) con los que contaba esa familia".
"Entiendo que el malestar, el dolor, la rabia social que produce la muerte de un bebé o un niño, nos dirige la mirada hacia esa mamá, desde el juicio o lo que 'se espera' del rol materno, pero es importante no quedarnos con ese primer momento, sino ir más allá y preguntar/nos por las otras presencias/ausencias en la vida de ese niño. ¿No había un papá? ¿no hubo vecinos que observaran?, planteó.
"En conclusión, este hecho debe invitarnos a pensar en el compromiso y la corresponsabilidad que tenemos todos los ciudadanos, antes las infancias, ya lo dice el dicho: 'Para criar a un niño, es necesaria la tribu entera'".
Cáceres está aprehendida a la espera de novedades de la Justicia. En tanto, en las últimas horas, trascendió que la fiscalía pedirá (mediante audiencia) que se convalide esa medida y se la convierta en detención. Aún no sabe la calificativa legal que podría caberle a la joven madre.








