Gaza: una paz con sombras, reflexiones de un docente santiagueño radicado en Beirut

El santiagueño Daniel Alberto Ayuch, profesor de Nuevo Testamento en la Universidad del Balamand, en una entrevista exclusiva con EL LIBERAL, analizó la situación que se vive en Medio Oriente tras el acuerdo de paz firmado entre Israel y Hamás.

 Ayuch destacó: "Desde Beirut, donde el eco de la guerra nunca se apaga del todo, sigo con atención las noticias del reciente acuerdo de paz entre Israel y Hamás, alcanzado con la mediación de Estados Unidos y firmado en Sharm el Sheikh, Egipto". 

"Como santiagueño y como profesor universitario que vive en Medio Oriente desde hace ya más de veinte años (reside en Ain Saade El Líbano), no puedo dejar de reflexionar sobre lo que este acuerdo significa para la región y, sobre todo, para el sufriente pueblo palestino". 

- ¿Qué representa el acuerdo de paz entre Israel y Hamás y con la intermediación de EE. UU?

-Este acuerdo representa, ante todo, un respiro humanitario. Gaza ha vivido más de dos años, y en realidad décadas, de destrucción, asfixia y desesperanza. Detener el fuego es una necesidad urgente, una cuestión de vida o muerte para millones de civiles atrapados entre el bloqueo y los bombardeos. 

No olvidemos que en este período murieron más de 67.000 personas de los cuales alrededor de un 70 por ciento eran mujeres y niños.

Pero este acuerdo de paz es también un llamado a que no se puede construir una paz verdadera sin justicia. Mientras la ocupación continúe, mientras el pueblo palestino no tenga garantizado su derecho a un Estado, la paz seguirá siendo una palabra frágil, casi simbólica.

- ¿Es la paz duradera en el convulsionado Medio Oriente o es la paz americana? 

-Lamentablemente, todo indica que se trata de una paz débil, frágil, sostenida más por el cansancio que por la convicción.

 No se trata aquí de culpar a los países ni de demonizar a nadie, sino de señalar que las políticas de poder, especialmente las que han privilegiado intereses geoestratégicos sobre los derechos humanos, han contribuido a una región llena de heridas abiertas. Estados Unidos ha desempeñado un papel importante en la mediación, pero la historia reciente nos muestra que, sin un compromiso real con la equidad y la autodeterminación de los pueblos, ningún acuerdo puede sostenerse en el tiempo. 

- ¿Consideras que el desarme de Hamás y el retiro de tropas, serán las más complicadas de la segunda fase del acuerdo de paz en Gaza?

  -Esta será, sin duda, la etapa más delicada. Hamás es una milicia armada, violenta y peligrosa, cuyos métodos no representan la aspiración de la mayoría del pueblo palestino. Lo ocurrido el 7 de octubre de 2023, con ataques indiscriminados y secuestros, es moralmente inaceptable y debe ser condenado sin matices. Ninguna causa justa se defiende con la violencia contra inocentes. Sin embargo, también es inevitable preguntarse por las fallas, o incluso la posible complicidad, de ciertos sectores del gobierno y del ejército israelí que, según varias 

investigaciones, podrían haber permitido o subestimado los indicios previos de aquellos ataques. Si fue por negligencia o por cálculo político, el tiempo lo dirá. Pero en ambos casos fueron civiles inocentes en su mayor medida quienes pagaron el precio. 

"Mientras Israel no reconozca a Palestina y no cese la ocupación, toda paz seguirá siendo incompleta" 

- Varios países reconocieron a Palestina como el Estado de Palestina, ¿consideras que Israel haría lo mismo o esta es la fase más complicada de todas? 

-Decenas de países en el mundo, entre ellos Argentina y varios de América Latina, ya reconocen a Palestina como Estado soberano. Ese reconocimiento es más que un gesto político: es un acto de justicia

Mientras Israel no reconozca a Palestina y no cese la ocupación, toda paz seguirá siendo incompleta. La verdadera seguridad sólo nacerá cuando el otro deje de ser visto como enemigo y empiece a ser reconocido como vecino, como pueblo, como igual. 

Desde esta orilla del Mediterráneo, donde las heridas de las guerras se sienten como propias, uno aprende que la paz no se impone: se construye sobre la verdad, la memoria y la dignidad. El pueblo palestino merece vivir sin miedo en sus tierras propias y usurpadas. Pero sólo la justicia puede garantizar una paz duradera.

"Egipto fue pieza clave en lograr este cese de fuego"

. ¿Qué rol jugó Egipto para qué la firma del acuerdo de cese al fuego para Gaza se haya realizado en Sharm el-Sheikh?

Egipto, que comparte frontera y destino con Gaza, fue pieza clave en lograr este cese del fuego. No es casual que el acuerdo se firmara en Sharm el-Sheikh, símbolo de diplomacia regional y terreno neutral dentro del mundo árabe.

El Cairo actuó como mediador por razones tanto políticas como humanitarias: busca estabilidad en su frontera, pero también se sabe depositario de una historia común con el pueblo palestino. Su papel, discreto pero firme, fue esencial para que las partes se sentaran a dialogar.

- La tercera etapa: contempla la reconstrucción de Gaza con la supervisión del expremier británico Tony Blair. Trump ya dijo que varios países árabes invertirán en esa reparación. ¿Cómo lo ves?

La tercera fase del acuerdo prevé la reconstrucción de Gaza, bajo supervisión directa de EEUU y con la posible participación del ex primer ministro británico Tony Blair junto a grandes inversiones prometidas por varios países del Golfo árabe.

Toda reconstrucción despierta esperanza, pero también exige vigilancia: Gaza no necesita ser reconstruida solo en sus muros, sino también en su tejido humano y moral, devastado por años de guerra y encierro.

La cooperación internacional es bienvenida, pero deberá evitar caer en la lógica del negocio o la propaganda. Gaza necesita una reparación auténtica, centrada en su gente.