Javier Milei intenta manejar los tiempos después de la victoria, pero la interna se impone.
El acuerdo entre Karina Milei y Santiago Caputo que impulsó a Manuel Adorni y marginó a Francos El acuerdo entre Karina Milei y Santiago Caputo que impulsó a Manuel Adorni y marginó a Francos
En el entorno del Gabinete se viralizó un sticker de Luis Caputo con un gesto triunfante, que Manuel Adorni utilizó para señalar su continuidad junto a Javier Milei tras las elecciones. Sin embargo, detrás de esta imagen se escondía la resolución de la interna entre Karina Milei, secretaria general de la Presidencia, y Santiago Caputo, principal asesor del Presidente.
El acuerdo otorgó un equilibrio de poder: Karina consolidó su rol político tras el triunfo electoral, mientras que Adorni fue promovido a la Jefatura de Gabinete, asegurando la presencia del karinismo y preparando la futura incorporación formal de Caputo al Ejecutivo. Sin embargo, el ascenso de Adorni provocó tensiones con Guillermo Francos, quien renovó su interés en continuar como jefe de Gabinete después de la elección.
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"Con Francos todo bien, pero empezó a cuestionarnos. La semana pasada decía que quería irse y ahora que la elección salió bien, quiere quedarse", comentaban cerca de Caputo. A pesar de su intención de continuar, la decisión del Presidente y la coordinación entre Karina y Caputo dejaron a Francos margenado, lo que derivó en su renuncia pública mediante redes sociales.
El operativo de cambios incluyó también la preparación de reemplazos ministeriales, mientras Caputo avanzaba en la negociación para asumir un mega ministerio que abarcaría Interior, inversiones, transporte y control de organismos clave, como la SIDE y Salud. Para Milei, Francos se convirtió en un obstáculo frente al ingreso de Caputo.
El acuerdo recibió respaldo de distintos actores externos, incluyendo lobbistas y figuras del establishment estadounidense, quienes respaldaban la salida de Francos, considerado cercano a intereses pro-China. Mientras tanto, Adorni consolidó su posición y Macri actuó como garante de normalidad durante la transición, aunque sin interferir en las decisiones internas.
En paralelo, la oposición peronista vivió momentos de tensión y desconcierto tras la elección, con Sergio Massa y Máximo Kirchner enfrentando el escenario electoral adverso y Axel Kicillof buscando reorganizar su estrategia en el interior del país.
El movimiento dentro del gabinete refleja no solo la dinámica interna del gobierno libertario, sino también el peso de las alianzas externas y la coordinación estratégica entre Karina Milei y Santiago Caputo, quienes lograron reconfigurar el poder ejecutivo tras la elección, menciona el portal TN.
