Juega en Primera desde los 13 y sueña con vestir la celeste y blanca.
Con 15 años, ya juega en Primera y sueña con la Selección Argentina de sóftbol Con 15 años, ya juega en Primera y sueña con la Selección Argentina de sóftbol
Juan Pablo Coman tiene apenas 15 años, pero su presente deportivo es el de un jugador formado para grandes desafíos. Hijo de Emilia Sequeira, el joven santiagueño, pertenece al Club 8 de Abril y ocupa una posición clave dentro de la cancha: es lanzador (pitcher), un rol de máxima responsabilidad dentro del sóftbol.
Juan Pablo comenzó a jugar a los 6 años y, con apenas 13, dio un salto que pocos logran: pasó de la categoría infantiles directamente a Primera División, enfrentando a jugadores de 25 años en adelante, con mucha más experiencia. Aun así, se ganó el respeto por su talento y disciplina.
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En el plano académico, cursa el tercer año en el Instituto Laura Vicuña, donde se destaca como un alumno responsable: no se llevó ninguna materia y es reconocido por su organización y compromiso. Además, combina su formación con el fútbol, ya que también integra la Octava División del Club Atlético Mitre.
Su crecimiento en el sóftbol estuvo guiado por figuras claves: su manager Franco Martínez, el apoyo permanente del presidente del club, el profesor Miguel Martínez (padre de Franco), y especialmente Juan Carlos Suárez, quien fue su formador, lo acompañó en torneos y le dio confianza para dar el salto de categoría.
A pesar de su corta edad, Juan Pablo ya tiene experiencia en competencias de alto nivel: participó en torneos en Paraná, Tucumán, La Pampa, Mendoza y Buenos Aires, y formó parte en dos oportunidades de la Selección Santiagueña, llegando incluso a disputar una final y una semifinal en torneos de alto nivel, siempre como lanzador.
El 2025 marcó uno de los grandes hitos de su carrera: se consagró campeón del Torneo Primavera (organizado por el Club Círculo) y fue distinguido con el premio individual al Mejor Pitcher del torneo. Además, disputó una final del Torneo Apertura y recientemente lanzó en una semifinal histórica, donde tiró 10 innings, superando los habituales 7, demostrando una madurez deportiva poco común para su edad.
Su mamá, en diálogo con EL LIBERAL, reveló el sacrificio familiar detrás de este sueño: "La verdad, con tantas expectativas, porque de infantiles pasó a jugar con gente de 25 años en adelante, con mucha experiencia. La gente habla muy bien de él, lo felicitan por su disciplina, su humildad y por cómo se enfoca en el juego con la edad que tiene".
También destacó el acompañamiento del entorno deportivo: "Juan Carlos Suárez fue quien lo formó y lo encaminó. El manager una vez lo invitó y de ahí quedó. Se siente muy contenido por sus compañeros, a pesar de ser tan chico".
El próximo paso ya está en marcha. Juan Pablo tiene una propuesta para comenzar a jugar en Paraná, Entre Ríos, en el club CEF de Paraná, a partir del próximo año. La familia ya se está organizando para acompañarlo en marzo y comenzar esta nueva etapa.
"Vivía de cancha en cancha. A veces dejaba mis ventas, mis sobrinos me atendían el negocio o directamente lo cerraba para acompañarlo. Soy emprendedora y vendo tortas, pero lo prioricé siempre. Mi marido trabaja en la universidad y muchas veces no podía, entonces yo estaba sola con él. Pero lo vale. Es mi único hijo y lo voy a apoyar siempre. Ahora estamos recaudando dinero para que siga creciendo. Él quiere llegar a la Selección Argentina y jugar en otros países", expresó emocionada su mamá.
