El Millonario arrancó ganando, pero cayó 3-1 ante el Canalla, que pelea con Boca por meterse en la Libertadores.
River fue una sombra, perdió con Rosario Central y pone en aprietos a Boca River fue una sombra, perdió con Rosario Central y pone en aprietos a Boca
Rosario Central le ganó 3-1 a River por la Copa de la Liga en un auténtico partidazo. El Millonario empezó ganando, pero el Canalla se lo dio vuelta con mucho merecimiento. Como ya se hizo habitual, al equipo de Demichelis le costó ser visitante y fue de mayor a menor. Incluso, terminó con 10 por la expulsión de Enzo Pérez.
Esequiel Barco había abierto el marcador a favor del Millonario con un golazo, pero Luca Martínez Dupuy, Leandro González Pírez en contra y Jáminton Campaz le dieron la ventaja al Canalla.
También te puede interesar:
De esta manera, Rosario Central da un paso clave pensando en la clasificación a la próxima Copa Libertadores. Al mismo tiempo, este resultado complica a Boca: el Xeneize está en la misma lucha y ahora debe ganar sus dos partidos y esperar marcadores de otros equipos para que le den las cuentas.
River jugó mejor en el primer tiempo y parecía recuperarse de la anterior derrota ante Huracán. Controló la pelota con sus cinco volantes, se adueñó del juego y minimizó a un Central que se dedicaba a esperar en su campo, con escasas ocasiones para salir rápido en contraataque con Campaz.
La abrumador superioridad táctica y técnica de River dio sus frutos en su primera llegada, a los 15 minutos, cuando Simón ubicó a "Nacho" Fernández por el callejón del ocho, Kevin Ortiz quiso cortar pero la tocó hacia Barco, quien entró solo por la derecha del área y definió con maestría ante la salida de Broun.
El partido pareció quedar servido para River, que continuó con su notable dominio del balón ante un Central que no hacía pie en el mediocampo.
Sin embargo, a los 46 minutos De la Cruz falló un pase hacia atrás, el ingresado delantero mexicano Martínez Dupuy la ganó por la derecha, abrió a Campaz, centro pasado al propio Dupuy y definición de derecha, que desató la primera explosión del Gigante de Arroyito.
El complemento repitió la película del primer tiempo, con un River que volvió a monopolizar la pelota, pero careció de profundidad hasta que a los 11 minutos Central desequilibró el trámite con un gol de pelota parada: córner corto desde la izquierda de Malcorra a Campaz, devolución por la raya de fondo, centro atrás fuerte y un fallido rechazo de González Pirez, que la clavó arriba, en el primer palo, en el segundo grito del Gigante.
El encuentro volvió a inclinarse a favor del local a los 17 minutos cuando Enzo Pérez, que estaba amonestado, le metió una plancha a Ortiz en el área local, por la que vio la segunda amarilla y fue expulsado.
River languidecía con el traslado estéril de la pelota hasta el borde del área, pero sin generar una sola llegada clara hasta que Central acertó a los 38 minutos su segundo contraataque y liquidó el pleito: salida limpia de Ortiz desde la izquierda de su campo, habilitación a Malcorra y asistencia precisa a Campaz por la misma punta y el "Bicho" la pinchó de zurda, de tres dedos, y metió de emboquillada en el segundo palo, en el golazo que desató la fiesta en el Gigante, que por primera vez coreó su sobrenombre.
Así, Central, que sufrió y la pasó mal ante la abrumadora superioridad de River en el primer tiempo, lo empató en el final y lo ganó con justicia con una gran reacción en el complemento, en una victoria épica con la que sumó su 28 partidio invicto como local y llegó a los 61 puntos en la tabla anual, en zona de Libertadores. Además, Central volvió a ganarle a River en el Gigante después de 14 años, desde 2009, cuando lo había vencido con goles de Guillermo Burdisso y Gonzalo Castillejos.
Ahora Central depende de sí mismo porque si vence a Arsenal en la última fecha confirmará su clasificación a la Copa Libertadores. Todo ello transcurrió en el último partido de Central en el actual Gigante de Arroyito, que dese mañana temprano comenzará a ser remodelado.
Central ganó esta noche un partido épico y por eso los hinchas "canallas" los despidieron con el clásico "Y ya lo ve, es el equipo de Miguel".








