Mirtha le dijo adiós a Mardel con tonada santiagueña

Por Emilio Marcelo Jozami (Enviado especial a Mar del Plata) La despedida de Mirtha Legrand, con sus tradicionales almuerzos, desde Mar del Plata, tuvo un fuerte acento santiagueño. Ayer, la diva le dijo adiós a "La Perla del Atlántico" con invitados donde Santiago del Estero, desde distinta ópticas, dominó el capítulo final de este ciclo que, después de cuatro años de ausencia, regresó a "La Feliz" el pasado 8 de enero. La "Chiqui" tuvo a Joaquín Furriel como invitado para hablar de El Patrón: radiodrafía de un crimen, una historia cuya trama se centra en la vida de Hermógenes Saldivar, un trabajador de Sol de Julio que asesinó a quien lo conchabó, en una carnicería de Buenos Aires, a raíz del hartazgo que tenía por los vejámenes a los que lo sometía su patrón. Además, al lado del actor argentino, estuvo Maximiliano Montenegro, periodista cuyo padre, Roger Montenegro, y sus tías Monena y Marta Susana Montenegro, viven en Santiago, una ciudad a la que Maximiliano visita asiduamente y que, cada vez que tiene salidas, desde Buenos Aires, por Radio Panorama, envía saludo a sus seres queridos. Mirtha, con Joaquín y Maximiliano no solamente habló de la película y de las raíces santiagueñas de Maximiliano, sino también de la realidad, de esa realidad que se cuela desde el primer hasta el último fotograma en El Patrón, filme que tendrá su estreno nacional este jueves 26 a partir de la temática que desarrolla. Con Joaquín y Maximiliano, "La Señora" habló también sobre la inseguridad, la educación, vivienda y el año político que se avecina, tópicos que fueron profundizados con Sergio Massa, candidato presidenciable del Frente Renovador, con Malena Galmarini de Massa y con el periodista Gerardo "Tato" Young, autor de dos libros que revela datos de cómo funciona la ex Side en nuestro país. Junto con todos ellos, Amalia Granata. La novia de Martín Redrado fue la que menos habló y que, cuando lo hizo, se refirió a su relación con el ex titular del Banco Central de la República Argentina, su trabajo y de la inseguridad. A bailar con Gilda Cielo plácido, mar quieto, un sol impío y el incesante ir y venir de turistas enmarcó el día de la despedida de Mirtha de Mar del Plata, ciudad a la cual, adelantó, regresará en enero del 2016. Y ese adiós no solo fue con una "mesassa", como dijo ella, de invitados sino también con el baile de los comensales al ritmo de la música de Gilda en la imitación tan precisa que hizo Fátima Flores de la inolvidable cantante argentina. Todos los invitados (Joaquín Furriel fue el más vivado) se dirigieron hacía las escalinatas de Playa Grande para presenciar el show de Fátima como Gilda y a mover sus cuerpos mientras Flores cantaba los clásicos de la malograda cantautora. Y así fue como Sergio Massa danzó con Fátima y luego con su esposa Malena como también lo hizo Furriel con Fátima. El público celebró jubilosamente esos momentos, y entre ellos Alexis, un santiagueño de Villa Hipólita quien, cartel en mano, vivó a Mirtha y sus comensales. Almorzando con Mirtha Legrand, en su despedida de Mar del Plata, más santiagueño, imposible.l