Abel Pintos renovó su idilio con las santiagueñas

El ritual se repite, desde el juego de seducción del artista hasta las declaraciones de amor mas increíbles de sus fans. Cada canción potencia esa relación. 

Subió abrigado y con su ya clásicos anteojos a lo John Lennon y el público, mayoritariamente adolecente, estalló de alegría. Ni hablar lo que generó en cada movimiento a lo Elvis Presley. 

El cielo está encapotado, pero no se anima a darle paso a la lluvia tal como sucedió aquel 31 de enero, en el inicio del Festival Nacional de La Salamanca 2019, cuando descargó una lluvia torrencial. 

Luego, hizo un alto en el show para agradecer al público y resaltar que se sentía orgulloso de haber podido concretar su actuación luego del traspié el 31 de enero por cuestiones climáticas. 

Y el juego de seducción continuó, con su luz y la belleza de sus creaciones, y ellas coreando cada tema al borde de un ataque de nervios.

"Ahora" y "Cien años", entre las composiciones nuevitas, fueron solo algunos de los ejemplos de esa manifestación de amor mutuo e incondicional que se profesan Abel y sus "Abeleras".

La noche gris, por ese cielo caprichosamente encapotado, fue combatida esta vez con alegría, celebración, calidez, poesía y mucha música.