Subteniente y oficial de la Bonaerense detenidos por amenazar de muerte a policías santiagueños

Dos policías bonaerenses que se trasladaban a la localidad de Moreno, terminaron su viaje en la Comisaría de Colonia Dora, luego de que en un control vehicular, uno de ellos exhibiera su pistola reglamentaria y ambos amenazaran de muerte a los policías santiagueños, presuntamente molestos por haber recibido una infracción de tránsito.

El caso tuvo lugar en el cruce de las rutas 34 y 92, en el acceso a la ciudad antes mencionada del departamento Avellaneda, en la noche del miércoles.

En el sitio señalado estaba montado un puesto de control vehicular de la Policía local cuando arribó una camioneta Chevrolet S-10 con cuatro ocupantes y un automóvil Volkswagen Suran. Los uniformados procedieron como indicaba la situación y pidieron a los automovilistas la documentación personal y de los rodados.

Así identificaron al conductor de la camioneta como Francisco Matías Monti, su madre, su esposa y su hijo, mientras que un hermano del primero, Luis Ezequiel Monti, conducía el segundo vehículo.

Hasta ese momento todo transcurría con normalidad, incluso los agentes habían notado que una de las pasajeras de la camioneta no llevaba el cinturón de seguridad ajustado, por lo que le habrían informado a su conductor que habían incurrido en una infracción de tránsito y que debían estacionar a un costado para labrar la correspondiente falta y multa.

Cuando los efectivos de la Patrulla de Caminos de la División Seguridad Vial le entregaron el comprobante de la multa, los conductores de los rodados se enfurecieron y comenzaron a insultarlos.

El automovilista habría descendido de manera amenazante del rodado y se habría identificado como policía, al grito de: “Si nosotros fuéramos otros, los hubiéramos matados como perros”, y su hermano habría abierto la puerta de la camioneta para exhibir un arma de fuego y gritar a viva voz: “él tiene razón, somos funcionarios, aquí está mi pistola”.

De inmediato se dio aviso a la Comisaría de Colonia Dora, cuyos efectivos llegaron rápidamente al lugar. Además dieron participación a la fiscal coordinadora Dra. María Emilia Gánem, quien comunicó la situación a la Dra. Gladys Liliana Lami, jueza de Control y Garantías, quien ordenó el registro de la camioneta, el secuestro del arma de fuego, la identificación de las personas y si pertenecen y si se hallan en actividad en la Policía de Buenos Aires.

En primer término se concluyó que efectivamente ambos conductores pertenecerían a la fuerza de seguridad mencionada y se hallaban en actividada. Francisco Matías Monti tendría jerarquía de subteniente escalafón general y prestaría servicios en el Comando 3 de Febrero, mientras que su hermano, Luis Ezequiel Monti tendría jerarquía de oficial, y trabajaría en la base de Luján, ambos con residencia en la localidad de Moreno, provincia de Buenos Aires.

Por su parte, personal de la División Criminalística de Añatuya procedió al registro de la camioneta e incautó una pistola Bersa, modelo Thunder, con respectivo cargador sin cartuchos de bala que se encontraba en el interior entre los asientos delanteros.

Además, por disposición de la Dra. Alejandra Sobrero, con conocimiento e intervención de la jueza de Control y Garantías, se inspeccionó el automóvil Volkswagen Suran, en cuyo interior se hallaron ocultas debajo de los asientos, tres pistolas Bersa Thunder Pro 9 mm., todas con almacén cargador sin cartuchos de bala.

Además, personal de la Policía santiagueña, dependientes de la Dirección General de Seguridad Vial, radicaron la denuncia en contra de los hermanos Monti por amenaza calificada por el uso de arma de fuego.

Una vez realizado todo el procedimiento, la Dra. Sobrero comunicó la decisión de la jueza Lami y los Monti quedaron aprehendidos por el supuesto delito que se les endilga, quedando alojados en la comisaría hasta que la unidad fiscal demande su comparendo en sede judicial.