Ariel Díaz, el santiagueño que eligió actuar inspirado por Guillermo Francella

Ariel Díaz ama su profesión de actor. Es la razón que lo sostiene y hace que siga respirando.

El joven santiagueño está en plena convalecencia después de haber protagonizado un accidente de tránsito que le provocó múltiples quebraduras en su cuerpo.

‘Actuar es todo. Si bien no se vive del teatro, si bien tengo mi otro trabajo, continuamente busco de actuar porque es lo que realmente me gusta, es lo que siento hacer. Yo, sin teatro no estaría completo’, destacó en diálogo con EL LIBERAL.

Y de a poco va volviendo al ruedo. Aún se sostiene en sus muletas pero eso no es obstáculo para hacer realidad su retorno a las tablas.

Sus colegas, la semana pasada, hicieron una función especial con la obra "Venecia" para recaudar fondos que le permitan a Ariel afrontar los gastos del tratamiento médico al que es sometido.

Y la fortuna de trabajar se presentó nuevamente para Ariel. Este viernes y sábado, en Hércules: Espacio de Artes Escénicas, subirá al tablado con el elenco de "La Colonia de Colón’. Precisamente, en esta pieza iba a trabajar en el debut pero, el accidente truncó esa posibilidad. Hoy se toma la revancha y se siente feliz y agradecido de poder continuar haciendo lo que "ama, lo que me hace feliz como es el teatro", según destacó en su conversación con EL LIBERAL.

La inspiración

Ariel supo desde niño que la actuación era el medio a través del cual se sentiría realizado.

Y la inspiración de convertirse en actor se la proporcionó Guillermo Francella, después de verlo, "en una de las primeras vacaciones que me llevó mi mamá a Mar del Plata", trabajar en una obra junto con Emilio Disi y Dorys del Valle.

Eran tiempos en que a Francella no lo registraba nadie pero, esos diez minutos que apareció en escena y la buena realización de su papel, deslumbraron a Díaz.

"Francella tenía un papel de quince minutos o menos. Me acuerdo que lo hizo tan bien que cuando él salió a saludar al público fue aplaudido de pie sin ser todavía Francella. A mí me ha contagiado eso de estar arriba del escenario y sentir el aplauso de la gente y eso fue lo que me ha llevado a decir si por qué no puedo subirme a un escenario yo", recordó Ariel.

"Me ha encantado entrar a un teatro, sentarme, ver una obra y decir qué lindo sería estar arriba jugando, haciendo un personaje. Me encantó eso, en primer lugar, y después ver a formidables comediantes, particularmente Francella, haciendo muy bien su trabajo", especificó.

Fascinado como estaba por lo visto en el registro actoral de Francella, cuando Díaz volvió a Santiago decidió, inmediatamente, empezar a estudiar actuación en el Teatro de la Universidad Nacional de Santiago del Estero (Tunse).

Evocó que al empezar sus estudios, "en un principio me costaba mucho", puntualizó que eso fue hasta que se dio "cuenta de lo que significa jugar, sentirse libre y jugar y encarnar un personaje. Antes que eso, uno no actúa".

Díaz sostiene que lo principal para hacer teatro "es que cuando se prende la luz, uno deja de ser uno".

Indicó que "si uno no la vive a la historia arriba del escenario, no la siente, no juega, debe replantearse y hacer que toda fluya". Ariel Díaz está de regreso. Feliz y dispuesto a dar su amor por la actuaciónl