"Airbag" crea en "Libertad"

Después de doce años de trabajo ininterrumpido y tener su propio norte con la música y lo artístico, "Airbag" se potencia en "Libertad" hacia la cima de los consagrados dentro del rock-pop en la Argentina.

Eso es lo que tuvieron siempre en claro, desde 2004 cuando aparecieron en la escena roquera nacional, los hermanos Patricio Sardelli, Gastón Sardelli y Guido Sardelli.

A doce años de aquel extraordinario surgimiento, Gastón le dijo a EL LIBERAL que siguen "creciendo y apostando al grupo porque nosotros vivimos por y para la banda y agradecidos con el público que nos sigue inondicionalmente".

¿Cómo conjugan ese amor del público con las responsabilidades que tienen ustedes?

Es felicidad y, a la vez, es realización.

Es también parte de un camino chiquitito que nunca sabes cómo sigue avanzando. Estamos en un punto en donde todavía no sabemos en qué lugar del camino estamos. Es como la vida misma. Seguimos haciendo, creciendo y apostando a vivir en un mundo con mejores condiciones de vida, de respeto y en libertad.

Y con un CD como "Libertad" donde está plasmada esa filosofía.

A fuerza de vivir uno va teniendo experiencias y nutriéndose de muchas cosas.

En "Libertad" tratamos de expresar lo que se vive en el mundo: si bien existe una libertad, en el sentido de que puedes andar por la calle, en líneas generales no vivimos en una sociedad feudal, pero tenemos el desafío enorme en un sistema tan voraz como el que vivimos en el mundo.

La canción "Libertad" empieza diciendo "el peso del mundo en tu espalda no deja brillar tu libertad". Consideramos que hay una presión tan grande sobre cada trabajador del planeta que ve limitada su posibilidad de libertad, de realizarse como persona y no someterse a condiciones de trabajo fea que terminan haciendo de la palabra libertad algo por conquistar en el mundo.

¿Cómo imaginaron que llegaría, a la gente, el mensaje de temas como "Noches de imsomnio", "Por mil noches", "Algo personal" y "Sonidos criminales"?

Es un disco de quince canciones que tiene una enorme variedad. Nosotros queríamos jugar con la idea de que el arte tenía que ser libre y que pueden coexistir distintas expresiones que van desde un "Por mil noches" hasta un "Noches de imsomnio" que es casi un funky rock.

Lo bueno es que los pibes están conscientes de muchas cosas y, entonces, han decodificado el mensaje de una manera natural y abrazaron las canciones no por un fanatismo sino porque encontraron que algo, de cada canciones, los identifica. Eso nos pone felices y nos marca el rumbo.