Brandoni se hizo cargo del hijo de una santiagueña Brandoni se hizo cargo del hijo de una santiagueña
“El Retiro”, filme argentino dirigido por Ricardo Díaz Iacoponi, tiene en su trama una historia relacionada indirectamente con Santiago del Estero. Es a través de Yanina, la chica que se encarga de la limpieza de la casa de Rodolfo, un médico recién jubilado. La fámula está interpretada por Eugenia Ruiz, actriz nacida en Santiago y radicada en Buenos Aires, mientras que a Rodolfo lo compone un ícono del cine nacional, Luis Brandoni.
Esta película, que se estrenará el próximo 5 de septiembre, marcó el debut de Eugenia en la pantalla grande. La artista, que además es médica, desarrolló trabajos actorales en obras de teatro, entre ellas “La Caprichos”, y en cortometrajes como “Pasionarias” y “La canción de María”. Pero su desembarco en el cine se da con “El Retiro” junto a un elenco excepcional liderado por Brandoni y secundado por Nancy Duplaá, Gabriel Goity, Soledad Silveyra y el niño Marcos Da Cruz, quien compone a su hijo en este drama.
Eugenia dialogó con EL LIBERAL.
¿Cuál es tu personaje en la historia del filme en donde Brandoni es un médico jubilado que queda a cargo de la crianza de un niño?
El personaje es Yanina, la chica que se encarga de la limpieza en la casa de Rodolfo, un médico recién jubilado. La madre de ella se enferma, entonces viaja de urgencia a Santiago del Estero. El personaje es como desfachatada. Ella, si bien es respetuosa con su jefe, es un poco desubicada. El tema es que yo no vi la película todavía y no sé con la edición que habrá quedado y cómo, yo te puedo hablar más o menos lo que hablaba con el director.
¿Cómo llega a vos la convocatoria para participar de “El Retiro”?
Fue por Instagram y también por un poco de magia. Yo he salido llorando del casting porque pensaba que no había dado con el personaje que requerían para la película. Pedían a una persona que encajara en mi rango etario, pero pedían actriz look tucumano y yo no entendía que era look tucumano. Después, cambiaron el posteo a actriz del norte o con tonada norteña. Y así fui cómo hice el casting con mi propia tonada. Cuando me envían el texto vi tenía que hacer de una mucama. Y cuando me fui al casting me fui vestida, caracterizada. Le pedí a una amiga de mi mamá que me dé un uniforme de empleada doméstica. Al poco tiempo, me envían un mail en donde me informaban que estaba preseleccionada. Ha sido una cosa muy mágica. No pensaba que estaba elegida. Así fue como lo conocí al director.
¿Qué sensaciones te embargaron en virtud de que la temática tiene cierta vinculación con Santiago?
Una de las cosas más geniales que tiene esto es que el personaje y la historia tengan algún tipo de vínculos con mi esencia. Cuando hacía teatro tenía que cambiarme la tonada. En El Brío, la escuela de teatro en donde me he formado con mi maestro querido Claudio Quinteros, nunca he actuado con mi tonada santiagueña, tampoco cuando hacía teatro. Tenía que hacer de porteña o sacarme el acento porque no tenía que hablar como santiagueña... porque soy muy santiagueña y amo serlo. Ahora, como me sucedió en “El Retiro”, poder actuar con mi tonada fue fabuloso porque el cuerpo se te coloca, la voz se te coloca. Todo es mucho más orgánico porque todo es natural. Felicidad pura de poder hacer de una santiagueña. Me da mucho orgullo.
¿Qué proyectos tienes tras este debut en el cine?
Tienen que ver con el teatro, con la autogestión, seguir haciendo casting. Escribí una obra. Mi objetivo es seguir estudiando y formándome porque, la verdad, esto es lo que yo amo desde que tengo uso de razón. Todas mis amigas se acuerdan que cuando venían a mi casa (en Santiago) las hacía actuar. Amo esto, sea en un teatro pequeño y con dos personas como espectadoras sigo porque es mi pasión. Disfruto de todo el proceso de la actuación, de lo que es ponerte en la piel de otra persona, encarar un personaje, tratar de componerlo. Amo actuar, en donde y como sea, no me importa. Me encantaría vivir de la actuación. Actuar es mi gran pasión. l








