Quién es Radamel, el niño que emocionó a Milo J

En Suncho Corral el arte está floreciendo. Hace apenas unas semanas, Rocío González emocionó al país con su ingreso a "La Voz Argentina", y ahora, otro talento local, Damián Radamel Stieffel -"Rada" para los amigos- está viviendo su propio momento soñado gracias a una inesperada visita: la del cantante Milo J, una de las figuras más potentes de la música urbana.

Pero la historia de "Rada" no es la de un cantante que se hizo de la noche a la mañana. Es la de un niño que canta desde los 2 años, que pidió su primera guitarrita a esa edad, y a los 7 aprovechó las clases de guitarra que daban en un Centro de Actividades Infantiles para aprender, de la mano del profesor Daniel Castillo.

Cuando apenas tenía dos años, con una pequeña guitarra en la mano y una canción de Sergio Dalma, "El mundo", la cantaba a su madre, una y otra vez.

"Desde chiquito me cantaba con su guitarrita. A los siete ya se presentaba en actos escolares. Su primera canción fue Criollita santiagueña", cuenta su mamá, Marcia Magalí Coria, enfermera del hospital de Suncho.

La vida lo llevó a participar en distintos espacios musicales, como un grupo de chamamé. Pero no todo fue alegría. "Un día lo noté triste porque ya no lo llamaban y habían puesto a otro cantante", recuerda Marcia. "Yo le dije: 'No te sientas así, algún día va a venir algo mejor'".

Y ese "algo mejor" llegó cuando menos lo esperaban.

La producción de Milo J desembarcó en Suncho Corral para grabar un videoclip, que les demandó hacer un casting de artistas. "Rada" se presentó, participó, incluso lo llevaron a grabar escenas en Atamishqui, pero como extra. "Me acuerdo de que él se preocupaba, se preguntaba si iba a aparecer en el video o no", confiesa Marca.

Y el destino, una vez más, le estaba reservando una sorpresa. Mientras descansaba al costado de un colectivo, tocando su guitarra, como lo hace siempre, por gusto, por amor a la música, uno de los productores se le acercó y le dijo: "Vení, que Milo te quiere conocer".

"Hemos estado como dos horas tocando, cantando, hablando. Él me ha dicho que le gustaba cómo toco, cómo canto, que le siga metiendo con la guitarra. Y su amigo Foco Foking (Enzo) me ha dado algunos consejos, como cómo usar el pecho para cantar o hacer falsetes. Cantamos juntos Lunita tucumana", cuenta.

De todo lo compartido con Radamel, Milo J subió a sus redes sociales un video del adolescente suncheño cantando –acompañado por su guitarra- la canción "Manos de tijera", de Camilo, en la versión de Huguito Flores.

Ese instante lo cambió todo. El impacto fue inmediato: "Tenía 1100 seguidores, y ahora casi 2000. El celular me explotaba de mensajes, notificaciones, comentarios, gente que me seguía, que me compartía. Ha sido increíble", relata emocionado.