Con estrategias alimentarias se pueden reducir los cuadros y síntomas de las alergias

El intenso frío se fue y el "viento de agosto" está cada vez más presente. Paralelamente a este cambio, se ve un notable incremento de afecciones propias de la época del año, las cuales tienen que ver con las alergias en sus más diversas manifestaciones.

Los molestos síntomas son motivo de muchas consultas médicas en los últimos días. Sin embargo, no solo hay maneras sanas de reducir el malestar, sino también de evitar que aparezca.

Al menos así lo considera la Lic. Raquel Carranza, especialista en Nutrición, en un diálogo con EL LIBERAL. Desde su conocimiento explica cómo los alimentos juegan un rol importante en el fortalecimiento del sistema inmunológico, lo que genera que el organismo esté con la "guardia alta" ante esta amenaza.

"La alimentación cumple un rol importante en el funcionamiento óptimo del sistema inmunológico y la nutrición debería ser un pilar fundamental en el tratamiento de ellas. La contaminación atmosférica como los cambios climáticos y/o estacionales hacen que se aumente la presencia de alérgenos como polen, insectos y de hongos asociados a enfermedades alérgicas, a lo que se agrega la industrialización de los alimentos y productos ultraprocesados que utilizamos ordinariamente en nuestra alimentación, lo que hace que permanentemente estemos en contacto con antígenos que producen una sobrerreacción de nuestro sistema inmunitario. El desarrollo de un sistema inmunológico completo contribuye a mantener estables y sanas las paredes mucosas de nuestro organismo, principalmente la gastrointestinal, pulmonar y urogenital, que son las barreras de defensa", expresa la especialista para explicar el funcionamiento del organismo.

Junto con el tratamiento médico apropiado, la alimentación también aporta lo suyo para mejorar la respuesta del sistema inmune y atenuar los signos propios de estos cuadros.

"Los patrones de los tratamientos se basarán en función de las causas, pero en general deben incluir Vitamina C, que por su poder antioxidante y antiinflamatorio, ayuda a contrarrestar la histamina (una de sus funciones en brindar protección contra agentes patógenos) y favoreciendo la microbiota intestinal", recomendó.

Los mismos pueden encontrarse en arándanos, ajo, cebolla, brócoli, coliflor, espinaca, pimiento, entre otros.

Asimismo, Carranza ofrece tips prácticos y recomendaciones sobre lo que al cuerpo le haría bien recibir en este tiempo.

"El kéfir o yogures con probiótico es una buena fuente alimentaria para consumirlos a diario. Los prebióticos son fibras vegetales especializadas. Estimulan el crecimiento de bacterias sanas en el intestino. Se encuentran en frutas y verduras. Estos carbohidratos no son digeribles por el cuerpo, por lo que pasan a través del sistema digestivo para convertirse en alimento para las bacterias y otros microbios", explica.

Las alcachofas, achicoria, que contienen inulina, un prebiótico natural; ajo y cebolla, que poseen derivados de inulina y fructooligosacáridos; y espárrago, que posee fructooligosacáridos, son ideales en este tiempo.

La necesidad de consumir el alimento adecuado

Es importante el consumo de alimentos adecuado: "Las alergias pueden tener factor etológico multifactorial. Por ello es importante alcanzar una permeabilidad óptima de las mucosas para evitar que los antígenos que hacen reaccionar al sistema inmune lleguen a la sangre, así como ayudar al hígado para que elimine el exceso de aminas y sustancias tóxicas", explica la especialista en Nutrición, Lic. Raquel Carranza.

En ese sentido, resaltó que "la mucosa intestinal es la mayor superficie del organismo. Si esta se encuentra deteriorada, agranda la permeabilidad intestinal pasando a la sangre sustancias que deberían ser eliminadas. Esto provocaría una agresión de nuestras defensas frente a estos antígenos, lo que podría contribuir al desarrollo de alergias, patologías inflamatorias y autoinmunes, etc.".