Russell Crowe asume un gran reto Russell Crowe asume un gran reto
Todo el talento de Russell Crowe sale a relucir a pesar de las tremendas capas de maquillaje que luce en “La voz más alta”, una miniserie de siete episodios que dibuja el ascenso y caída del difunto Roger Ailes, el conservador que revolucionó la televisión estadounidense.
Crowe, en su mayor reto interpretativo en años, se mete en la obesa piel de Ailes y lo recrea como un hombre brillante, visionario y amado por sus compañeros, pero capaz de convertirse en un monstruo megalómano y misógino que no se frena ante nada ni ante nadie en su misión de crear una cadena de referencia para el electorado republicano.
“La gente quiere ver sus problemas y sus creencias reafirmados y amplificados, no confrontados. La gente no quiere estar informada, quiere sentir que está informada”, sostiene rotundo el personaje de Crowe en el primer episodio, ofreciendo la clave ideológica en torno a la creación de Fox News.
La miniserie arranca con la muerte de Ailes en 2017 y echa la vista 20 años atrás para explicar su salida de CNBC y su asociación con el magnate de la comunicación Rupert Murdoch.
Cada episodio se centra en un año de la vida de Ailes y en el segundo capítulo la trama avanza hasta 2001, durante la cobertura de los atentados del 11-S y la maquinaria ideológica que culmina con la guerra en Irak. El tercero, el último facilitado a los medios, se adentra en el enfrentamiento de Ailes con Barack Obama durante la campaña presidencial y su posterior llegada a la Casa Blanca.
El reparto lo completan Sienna Miller (difícil de reconocer por el maquillaje en su papel de Elizabeth, la esposa de Ailes), Naomi Watts (que encarna a Gretchen Carlson, la periodista de Fox que dio a conocer los abusos de Ailes) y Seth MacFarlane en un gran cambio de registro interpretando a Brian Lewis, exjefe de relaciones públicas de la cadena.