Hoy arranca En terapia Hoy arranca En terapia
Manteniendo su dinámica tradicional, la serie -una adaptación local del exitoso programa israelí Be Tipul- mostrará en 40 capítulos de media hora nuevas sesiones de terapia a cargo del analista Guillermo Montes quien, interpretado por Peretti, este año deberá afrontar una grave crisis personal.
En esta segunda parte de la serie, adaptada por Esther Feldman y Alejandro Maci, el terapeuta se divorcia de su mujer y se instala en un departamento en el que además establecerá su consultorio.
Al mismo tiempo retomará su relación con Norma Aleandro, con ella en el rol de su terapeuta y no ya solamente como supervisora clínica.
Nuevos casos
El doctor Montes continuará, más allá de sus desasosiegos personales, abordando nuevos casos y atenderá a Juliana (Carla Peterson), una abogada de 41 años obsesionada con ser madre en el preciso momento en que esa posibilidad parece volverse imposible; a Valentina (Luisana Lopilato), una estudiante de arquitectura que acaba de ser diagnosticada de un cáncer linfático; y a José ( Roberto Carnaghi), un empresario a punto de ser despedido que cree que su vida perdió sentido.
También volverán a pasar por su consultorio la ex pareja de Ana y Martín (Dolores Fonzi y Leo Sbaraglia), terapia a la que se sumará su hijo Maxi (Gonzalo Slipak), un niño con sobrepeso y de carácter esquivo quien desespera a sus padres.
Algunas innovaciones
A la estructura tradicional del programa, en la cual los actores de cada emisión suelen encontrarse sentados para charlar sus conflictos frente al terapeuta, se agregan algunas innovaciones para esta segunda parte.
El ciclo sumará escenas que se desarrollarán en la sala de espera y el ambiente del consultorio también será diferente, ya que Montes se separó y mudó su trabajo y sus libros a un nuevo espacio, donde se realizarán los encuentros.
Además de protagonizar En terapia, el extraordinario actor Diego Peretti estudia la posibilidad de participar de una versión de la comedia francesa El placard, que se vió en cine, y que aquí iría en una versión teatral con Alejandro Awada, Osvaldo Santoro y él, bajo la dirección de Lía Jelín.
“La del actor es una profesión muy humana, muestra todo lo que hay en la realidad y nos llama a reflexionar sobre ella. De ahí que no deje de ser peligrosa para ciertos intereses y haya quienes intenten atenuarla, adormecerla, estupidizarla, atacando un flanco muy débil del actor que es la vanidad. El actor decía Alberto Ure sirve como modelo y parodia de una época. Son los dos extremos, se lo tiene como referente o para la cargada. Por eso hay que estar muy centrado, porque es fácil bandearse”, puntualizó Peretti en una entrevista.








