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EL LIBERAL . Santiago

Los efectos negativos de la contaminación ocular (primera parte)

Por el Dr. Ricardo Passone.

05/05/2025 06:00 Santiago
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¿Sabes cuáles son los síntomas más comunes que pueden indicar un daño ocular debido a la exposición a contaminantes? ¿Conoces las posibles consecuencias a largo plazo de vivir en un entorno con altos niveles de polución? Si tu respuesta es no, te explicaremos en detalle los efectos negativos de la contaminación en los ojos, abordando desde las condiciones más frecuentes, como lo puede ser el humo habitual en Santiago en los meses de otoño e invierno, hasta las complicaciones más severas.

¿Cuáles son los principales contaminantes oculares?

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Los problemas oculares causados por la contaminación ambiental se han vuelto cada vez más frecuentes, en especial en las zonas urbanas y altamente industrializadas. Los contaminantes presentes en el aire interactúan con la superficie ocular, causando una variedad de inconvenientes que van desde la irritación leve hasta afecciones más graves. Conoce algunos de los principales contaminantes a continuación:

1. Partículas en suspensión

- Polvo: las partículas de polvo son uno de los contaminantes más comunes. Al entrar en contacto con los ojos, pueden causar irritación, picazón y enrojecimiento.

- Humo: el humo, proveniente de la combustión de combustibles fósiles o incendios, contiene una mezcla de partículas finas y gases irritantes que pueden dañar la superficie ocular y contribuir al desarrollo de enfermedades oculares crónicas.

- Hollín: el hollín, compuesto principalmente de carbono negro, es un contaminante muy dañino. Puede causar irritación ocular severa, así como aumentar el riesgo de desarrollar cataratas y otras enfermedades oculares.

2. Gases contaminantes

- Dióxido de azufre (SO2): este gas irrita las membranas mucosas, incluyendo los ojos, y puede causar conjuntivitis y otros problemas oculares.

- Óxidos de nitrógeno (NOx): estos gases son altamente reactivos y pueden formar compuestos nocivos en la atmósfera. Al entrar en contacto con los ojos, pueden causar irritación, lagrimeo y visión borrosa.

- Ozono (O3): el ozono a nivel del suelo es un contaminante peligroso que puede causar daño a los tejidos oculares, incluyendo la córnea.

3. Alérgenos

- Polen: el polen de las plantas es una causa común de alergias oculares, especialmente en primavera. Puede causar picazón intensa, enrojecimiento y lagrimeo.

- Ácaros del polvo: estos diminutos artrópodos viven en el polvo doméstico y pueden desencadenar reacciones alérgicas en los ojos.

4. Otros contaminantes

- Metales pesados: el plomo, el mercurio y otros metales pesados pueden causar daño ocular si se inhalan o se entran en contacto con los ojos.

- Partículas finas: las partículas ultrafinas, como las emitidas por los motores diésel, pueden penetrar profundamente en los pulmones y los ojos, causando daño a nivel celular.

Enfermedades oculares asociadas a la contaminación

La contaminación ambiental, un problema normalizado en la actualidad, genera un impacto directo y perjudicial en nuestra salud ocular. Los contaminantes presentes en el aire interactúan con nuestros ojos, desencadenando diversas enfermedades oculares que pueden afectar significativamente nuestra visión y calidad de vida como:

a. Síndrome del ojo seco

La contaminación ambiental tiene un impacto directo en la película lagrimal, la delicada capa protectora que recubre la superficie del ojo. Esta alteración puede llevar a la disminución de la cantidad y calidad de las lágrimas, resultando en una condición conocida como síndrome del ojo seco. Los síntomas más comunes incluyen sequedad, ardor, picazón y una sensación de cansancio ocular.

Además de estas molestias, la falta de lubricación adecuada puede comprometer la salud ocular a largo plazo, provocando potencialmente lesiones en la córnea. Estas lesiones pueden variar en severidad y, si no se tratan adecuadamente, pueden llevar a complicaciones mayores, afectando la visión de manera significativa.

Lo que debes saber
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