Lo hallaron sin vida el pasado sábado. La noticia generó conmoción entre los fieles y religiosos.
Conmoción por la muerte del padre Matteo Balzano: se quitó la vida a los 35 años y dejó un fuerte llamado sobre la salud mental del clero Conmoción por la muerte del padre Matteo Balzano: se quitó la vida a los 35 años y dejó un fuerte llamado sobre la salud mental del clero
La comunidad católica en Italia y el mundo entero atraviesa momentos de profunda tristeza tras la trágica muerte del padre Matteo Balzano. El sacerdote, de 35 años, fue hallado sin vida el sábado 5 de julio en su residencia parroquial de la localidad de Cannobio, en la región de Piemonte. La noticia generó conmoción entre fieles, religiosos y cientos de personas que lo conocían por su entrega pastoral y cercanía con los jóvenes.
También te puede interesar:

Según informaron fuentes eclesiásticas, el padre Matteo se quitó la vida. El hecho fue confirmado por la diócesis de Novara mediante un comunicado que remarca el dolor por su pérdida y deja una reflexión abierta. "Nadie había percibido señales de malestar. Solo el Señor, que escudriña el alma, conoce los misterios más profundos del corazón humano", escribió uno de los presbíteros que lo conocía.
Matteo Balzano era originario de Borgomanero y había sido ordenado sacerdote en 2017. En poco tiempo se convirtió en un referente espiritual por su trato cálido, su trabajo con jóvenes y su sensibilidad en el acompañamiento pastoral. Su partida dejó un vacío enorme en la parroquia y provocó un fuerte sacudón en redes sociales, donde miles de fieles compartieron mensajes de dolor, oración y llamado a cuidar la salud mental de los sacerdotes.
Sacerdotes como el padre Luis Zazano y el padre Omar Buenaventura compartieron sentidos mensajes en redes, destacando que esta muerte no debe silenciarse. "Los sacerdotes no somos máquinas, somos seres humanos frágiles", escribió Zazano, quien también reveló haber atravesado años de depresión. Buenaventura, en tanto, expresó: "Esta muerte grita por sí sola", recordando que los curas también cargan dolores, heridas y soledades profundas.
Desde la diócesis, se convocó a una jornada de oración por el eterno descanso del padre Matteo y por el consuelo de quienes lo amaron. Al mismo tiempo, crece un llamado a la comunidad católica a abrazar a sus sacerdotes con cercanía, contención y oración. "Necesitamos que nos traten como hombres, no como máquinas", fue una de las frases que más se repitió y compartió entre los mensajes de dolor.








