Gastón Verón: "Mi madre me iluminó desde arriba en esa pegada"

Central Córdoba logró un triunfo clave el pasado lunes por la noche al vencer 2 a 1 a Defensa y Justicia, en el marco de la tercera fecha del Torneo Clausura de la Liga Profesional. Pero más allá del valor deportivo de la victoria, la historia más profunda y conmovedora la protagonizó el mediocampista ofensivo Gastón Verón, autor del gol del triunfo con un soberbio tiro libre y quien atraviesa un duro momento personal: la reciente pérdida de su madre.

"Estoy seguro de que el gol fue un regalo de ella. Fue una semana difícil, pero el grupo estuvo siempre presente con un mensaje, una llamada. Eso también se valora y se siente. Este triunfo es de todos", expresó Verón con visible emoción luego del encuentro. El ex Argentinos Juniors encontró en el fútbol una forma de canalizar el dolor y, al mismo tiempo, brindarle a su equipo una victoria trascendental para seguir sumando en un torneo exigente.

El partido fue tan intenso como parejo. Verón reconoció lo complejo que resultó para el "Ferroviario": "Fue muy trabajado, no encontrábamos cómo marcar su salida desde el fondo. Defensa tiene un gran equipo, pero supimos aguantar y lo sacamos adelante. Fue un partido de ida y vuelta, muy dinámico".

El gol llegó desde un tiro libre con sello propio. "Había visto el espacio, sabía que tenía que pegarle ahí. Me sentí con confianza y se lo manifesté a mis compañeros. A veces es difícil decidir quién patea, pero estaba convencido de que podía salir bien. Y por suerte, salió", explicó Verón sobre la ejecución que desató el festejo de todo el estadio.

Con el tanto, Central Córdoba cortó una racha adversa por el campeonato local y volvió a sumar de a tres, justo después de la clasificación en la Sudamericana. Para Verón, eso también fue fundamental: "Necesitábamos esta victoria, veníamos de partidos donde no se nos daban las cosas. Lo importante es que seguimos creyendo en el trabajo del grupo. Ahora hay que pensar en lo que viene y no bajar los brazos".

El gol, el rendimiento colectivo, el apoyo del plantel y la memoria de su madre se unieron en una noche que Verón jamás olvidará. Porque no fue solo una victoria deportiva: fue una caricia al alma en medio del dolor, un símbolo de resiliencia y amor. Y como él mismo dijo: "Ella me iluminó desde arriba con esa pegada", cerró el hábil volante ofensivo.

Mirá el gol: