Para analistas, la incidencia del traspaso a precios es ínfima, pero no descartan pueda sentirse más adelante, según la magnitud del movimiento cambiario.
El dólar oficial subió al récord de $1.385 y preocupa el impacto en los precios El dólar oficial subió al récord de $1.385 y preocupa el impacto en los precios
El dólar minorista operó ayer con una suba de sesenta pesos, a $1.385 en las pantallas del Banco Nación, con lo que marcó un nuevo máximo histórico, mientras en el mercado informal, el dólar blue se negoció con un incremento de quince pesos, en $1.335.
En el segmento financiero, el contado con liquidación (CCL) avanzó 3,1% y se ubicó en $1.360, mientras que el dólar MEP ganó 2,8% hasta los $1.344. Por su parte, el tipo de cambio mayorista se negoció con un incremento de $59, en $1.374.
El régimen de tasas endógenas que impulsa el Banco Central continúa generando tensiones e inestabilidad en el sistema financiero, según advirtieron especialistas del mercado. Tanto en el análisis del reciente vencimiento de las LEFIs como en la evolución de las tasas de interés y su impacto en el tipo de cambio, los expertos coincidieron en que el sistema exhibió una dinámica desordenada que terminó trasladándose al resto de la economía.
Por ahora, de acuerdo con las consultoras privadas que realizan mediciones, el avance del tipo de cambio no ha generado un traslado a los precios de la economía. Por lo menos, no de manera contundente.
Las causas
De acuerdo con los analistas, el exceso de liquidez inicial derivó en un desplome de las tasas, seguido por un faltante provocado por una licitación extraordinaria del Tesoro. Este vaivén generó movimientos abruptos en las cauciones y en el mercado cambiario, donde el dólar llegó a superar los $1300 en su punto más alto, para luego retroceder. La ausencia de un mecanismo estabilizador por parte del Banco Central que decidió retirarse como intermediario de liquidez dejó expuestos los riesgos del esquema monetario vigente.
Asimismo, indicaron que esta volatilidad responde a la lógica del régimen, que fija metas sobre agregados monetarios y permite que las tasas se ajusten libremente. Sin embargo, el mercado continúa demandando mayor previsibilidad: se espera que en algún momento se establezcan pisos y techos para las tasas, o bien que se habilite una ventanilla de liquidez para amortiguar estos shocks. En paralelo, la presión sobre los fondos de inversión, los rescates en money markets y las estrategias especulativas reavivaron la búsqueda de cobertura cambiaria.
Para los especialistas, pese al desorden inicial, la semana concluyó con cierta estabilización en el tipo de cambio y las tasas. Las condiciones de corto plazo volvieron a favorecer estrategias de carry trade, gracias a una tasa de interés en retroceso y expectativas de inflación que se mantienen ancladas. Pero, alertaron que la dinámica monetaria seguirá marcada por sobresaltos mientras no se defina un marco de mayor certidumbre.
Mercados
En medio de una renovada tensión cambiaria y política, los mercados locales e internacionales mostraron señales divididas. Ayer, el índice Merval anotó su séptima rueda consecutiva en alza, con una suba del 0,5%, y marcó su mejor racha desde inicios de mayo. Pero, los bonos en dólares y las acciones argentinas que cotizan en Wall Street operaron con fuertes retrocesos.
Entre las acciones líderes se destacaron Aluar, con un alza del 5,2%, y Edenor, que avanzó 2,9%. En contraste, las acciones argentinas en Nueva York cayeron hasta 6% (Tenaris). En renta fija, los bonos soberanos extendieron la tendencia adversa. El Global 2046 lideró las bajas con una caída del 1,9%.








